
El ministro de Finanzas griego, Yorgos Papaconstantínu, declaró que su país está satisfecho con el acuerdo alcanzado hoy por los países de la eurozona para poner a disposición de Grecia un crédito de 30.000 millones de euros en caso de que lo necesite, e insistió en que aún no ha pedido activar ese plan.
"El Gobierno de Grecia no ha pedido activar el mecanismo pese a que está ya a disposición de forma inmediata", dijo el ministro en declaraciones desde Atenas.
"La decisión es importante tanto para Grecia como para la eurozona y muestra la confianza de los socios europeos en Grecia," añadió.
Solidaridad de "carne y hueso"
Horas después, el primer ministro griego, Yorgos Papandréu, manifestó que "la red de protección del Eurogrupo adquirió hoy una forma determinada" y destacó que "la solidaridad europea es de carne y hueso".
En declaraciones a los medios de comunicación griegos a su llegada a Chipre, el mandatario se refirió así al acuerdo alcanzado para poner a disposición de Grecia 30.000 millones de euros en caso de que el país necesite ayuda.
"La decisión de hoy no tiene que ver sólo con Grecia, sino que es una importante decisión para toda Europa", declaró Papandréu.
El político socialista añadió: "Es un mensaje de que ya nadie puede jugar con nuestra moneda común (el euro) ni con nuestro destino común y de que la Unión Europea sigue siendo una comunidad de valores comunes, objetivos y solidaridad".
En ese sentido, manifestó su certeza de que el país "avanza cada día en el sendero hacia el final de la crisis".
Otros 40.000 millones de euros estarán a la disposición de Grecia para 2011 y 2012 en caso de que el país necesite nuevas ayudas.