
El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, ha asegurado que ha recibido una "respuesta muy positiva" del presidente estadounidense, Barack Obama, en sus llamamientos contra la especulación en su reunión de hoy en la Casa Blanca.
Ambos líderes se reunieron hoy a puerta cerrada en el Despacho Oval por espacio de una hora en la que el primer ministro griego explicó al presidente estadounidense los esfuerzos de su país para reducir el grave déficit presupuestario que padece.
En declaraciones al término del encuentro, Papandreu aseguró que no ha solicitado a Estados Unidos ningún plan de rescate para la economía griega.
Obama, declaró el primer ministro, expresó su "apoyo" a las medidas del Gobierno heleno y a las propuestas europeas para atajar la especulación en los mercados, que se disparó en las últimas semanas cuando los operadores comenzaron a apostar acerca de posibles impagos de la deuda griega.
Un asunto para el G20
El asunto, aseguró, se planteará en la próxima cumbre del G20, las principales economías del mundo, cuando se reúnan en Canadá el próximo junio.
Tanto el presidente francés, Nicolas Sarkozy, como la canciller alemana, Angela Merkel, y otros líderes europeos han asegurado que no permitirán que los especuladores "jueguen" con el euro, afirmó Papandreu.
El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, aseguró hoy que esa entidad estudia la posibilidad de prohibir algunas operaciones de venta de acciones al descubierto, como han pedido Merkel y Sarkozy, para frenar los ataques especuladores contra la deuda soberana de los países de la zona euro.
Víctimas de especuladores
Papandreu expresó su satisfacción por este anuncio y aseguró que ha informado a Obama -que busca una reforma del sistema de regulación financiera en su país- sobre estas iniciativas.
"Nosotros hemos sido las víctimas de los especuladores en los últimos meses. Obama me aseguró que considera la iniciativa útil, importante y positiva y que Estados Unidos contribuirá en esta dirección", aseguró.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, indicó que los dos líderes abordaron la reforma financiera y la recuperación económica.
Como en anteriores ocasiones, Gibbs indicó que el Gobierno de EEUU cree que la crisis griega "es un asunto de la Unión Europea, que creemos que cuenta con la capacidad de resolver este asunto" de manera satisfactoria.
El portavoz no se pronunció sobre las propuestas europeas para prohibir algunas operaciones de venta de acciones al descubierto y de efectuar una "reflexión" sobre los llamados CDS (Credit Default Swaps), seguros que salvaguardan a los compradores de deuda ante posibles impagos, y sobre la especulación que algunos inversores hacen con ellos.
Plan de reestructuración
Obama, reiteró el portavoz, se mantiene informado con regularidad del desarrollo de la crisis en Grecia.
Los intereses de los bonos del país heleno se han disparado debido a la crisis de sus cuentas públicas.
Grecia registró un déficit el año pasado equivalente al 12,7 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), en lugar del rango entre el 6 y el 8 por ciento que había previsto el Gobierno anterior, y su deuda supera el 110 por ciento del PIB.
La administración de Papandréu ha presentado un plan para sanear las cuentas públicas que incluye medidas drásticas para bajar los gastos y elevar la recaudación pública.
El primer ministro griego se encuentra en Washington para una visita de tres días, durante la cual ya se ha reunido, además de Obama, con la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y con líderes del Congreso.
También pronunció una conferencia en el centro de estudios Brookings Institution, en la que advirtió contra el peligro de las actividades especuladoras, que considera que han elevado el tipo de interés al que Grecia debe hacer frente y que a su juicio podrían desatar una nueva crisis en el futuro.