La salud del sistema de prestaciones públicas no está del todo garantizada como asegura el Gobierno de Zapatero. En la actualidad, En España a cada trabajador le corresponde un subsidiado.
La consiguiente caída del número de cotizantes de la Seguridad Social y de pagadores de impuestos han llevado a España a una situación difícil de sostener desde el punto de vista político.
Tantos dependientes como trabajadores
El número de dependientes de estas prestaciones o subsidio, señala este domingo el suplemento Mercados de El Mundo, alcanza ya el 81% de la cifra de trabajadores de la Seguridad Social. Roza el temido uno por uno, o lo que es lo mismo, un sueldo del que debe vivir el propio trabajador y, además, pagar a una personas su subsitencia depende de una renta pública por desempleo, jubilación o viudedad.
Entre tanto, los responsables del Gobierno prefieren no recordar ese dato. Las cifras por comunidades son igualmente reveladores, indica Mercados. Dos autonomías sobrepasaron directamente el nivel de un preceptor por trabajador. Se trata de Asturias y Galicia.
Es verdad que la Seguridad Social sigue contando con una caja única central, pero lo cierto es que no parece que los cotizantes del resto de los territorios estén en condiciones de asistir sin problemas en las regiones más perjudicadas por la crisis.
Las 'lentejas' de las pensiones
Todos estos datos, rubrica El Mundo, se han convertido en clave de las exigencias internacionales a España de una reforma del sistema de pensiones. El propio Banco Central Europeo recordaba que "un sistema de pensiones funciona sobre la base de gente que paga y gente que cobra. Si la gente que cobra tarda más en incoporarse al mercado laboral y trabaja menos años, y la gente que percibe vive menos años, parece lógico que haya que restaurar la proporcionalidad contributiva del sistema".
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