La inflación británica se aceleró en enero hasta el 3,5% interanual, su máximo desde noviembre de 2008, según las cifras difundidas este martes por la Oficina Nacional de Estadísticas. El Banco de Inglaterra ha tenido que dar explicaciones al Gobierno británico.
Según la normativa del Reino Unido, cuando la inflación supera el objetivo en más de un punto porcentual -actualmente es del 2%-, el gobernador del Banco de Inglaterra tiene que informar mediante una carta pública al ministro británico de Finanzas.
Según las explicaciones del gobernador Mervin King, este aumento de la inflación se debe a "una desviación temporal" del objetivo del 2%. La debilidad del consumo ha creado un "margen sustancial de capacidad no utilizada" en la economía que se espera que presione a la baja los precios con el tiempo.
King ha añadido que el Comité de Política Monetaria está comprometido a tomar "las decisiones que sean necesarias" para asegurar que las perspectivas de inflación se mantendrá en línea con el objetivo del 2%.
Subida de impuestos y caídas de la libra
Una de las causas de la subida de los precios fue la eliminación de la rebaja del IVA del 2,5% que el Gobierno había llevado a cabo para alcohol, tabaco, ocio, restauración y hoteles. La eliminación se llevó a cabo el mes pasado, volviendo el impuesto al 17%.
Los profundos descuentos que se realizaran en las rebajas del año pasado no se han repetido en enero de 2010, lo que ha impulsado los precios. Algo a lo que también ha contribuido la caída de la libra, que ha encarecido las importaciones.
No obstante, el mayor contribuyente con diferencia al incremento de precios fue el transporte, como reflejo, no sólo del aumento del IVA, sino de los precios del combustible y de los lubricantes.
Con todo, este dato cumple con las expectativas del mercado, que esperaba un 3,5% de incremento del IPC, según la media de los expertos consultados por Bloomberg. En términos intermensuales, los precios descendieron un 0,2%, la caída más baja para un mes de enero desde que se comenzaron a registrar los datos en 1997.
Récord en la inflación subyacente
La inflación subyacente, que excluye los costes de la energía, comida, alcohol y tabaco, aumentó hasta el 3,1%, la mayor subida desde que hay datos, aunque una décima por debajo de lo esperado por los analistas.
La semana pasada, Mervyn King aseguró que el Banco de Inglaterra no podría controlar las oscilaciones de los precios a corto plazo, ya que la debilidad de la libra, el aumento del precio de las materias primas y el final de los recortes de impuestos harían aumentar los precios al consumo. Según las previsiones del banco central, la inflación se ralentizará hasta el 0,9%.
La carta de hoy de King es la sexta que se ha visto obligada a escribir el banco central desde que se garantizó su independencia para decidir sobre tipos de interés en 1997.