
El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, ha comparecido hoy ante el Comité económico del Congreso estadounidense. Durante su intervención, la cita más esperada de la semana, ha señalado que el crecimiento económico "continuará moderándose" y que la inflación se encuentra "incómodamente alta".
Bernanke ha dejado claro que la "incertidumbre sobre las perpectivas económicas" estadounidenses ha aumentado recientemente y que las futuras decisiones de la Fed dependerán de lo que suceda con la inflación y el crecimiento económico.
Crecimiento
Y según el presidente de la Fed, el crecimiento económico "continuará moderándose durante los próximos trimestres". Bernake ha explicado que el principal origen de la desaceleración de la actividad que comenzó la pasada primavera ha sido la corrección sustancial del mercado inmobiliario, al mismo tiempo que ha reconocido que "las perspectivas a corto plazo para el mercado inmobiliario permanecen inciertas".
Inflación
En cuanto a la evolución de los precios, el sucesor de Alan Greenspan ha indicado que "continúa incómodamente alta", pero espera que "se modere gradualmente con el tiempo", pero ha reconocido que mientras eso ocurre, "los riesgos son alcistas".
Respecto a la crisis del sector hipotecario de alto riesgo, cree que es un "problema cuyo impacto está probablemente contenido" ya que, hasta el momento, "no hemos visto ningún indicio significativo de que esto se haya contagiado a otros mercados de crédito".
Los comentarios de Bernanke son los primeros desde que
la Fed decidió la semana pasada mantener los tipos de interés en el 5,25% a la vez que abandonaba su inclinación anterior a una posible subida. Sus palabras llegan después de que los últimos datos conocidos este mes mostraran un descenso en la venta de viviendas nuevas y en la confianza de los consumidores.
Estos factores han llevado a los analistas a hacer pronósticos sobre cuándo el banco central estadounidense aplicará la primera bajada de tipos, después de que pusiera final en junio del año pasado a su política de subidas, con la que elevó el precio del dinero desde el 1% hasta el 5,25% actual, mediante 17 alzas consecutivas de un cuarto de punto cada una.