
Las hipotecas se van a ver sacudidas este año por tres importantes factores de cambio: subida de tipos de interés e IVA de la vivienda, a mediados de año, y fin de las deducciones por nueva compra, a partir del 31 de diciembre, si es que el Ejecutivo mantiene esta promesa.
El malogrado sector inmobiliario español, en el epicentro de la crisis, sigue sufriendo las consecuencias del desplome de los precios. El año cerró con un 5,7 por ciento de caída en vivienda nueva, según la Sociedad de Tasación, y un 6 por ciento en el mercado de segunda mano. Pero, con todo, el dato más llamativo es el que ofreció The Economist esta semana: el precio de la vivienda en España continúa un 55 por ciento sobrevalorado pese a la senda bajista recorrida hasta la fecha, según un indicador creado por esta publicación que refleja que este desajuste es el más abultado de entre los principales mercados mundiales.
Sin embargo, tres hitos marcarán un cambio de tendencia este año en este mercado y sobre todo en el de la financiación de la vivienda, en las hipotecas. En primer lugar, hay que empezar a despedirse de los tipos actuales. A lo largo del año, y si los indicadores económicos acompañan, habrá una subida de tipos que podría llegar en el tercer o cuarto trimestre que tendrá su correspondiente impacto en el indicador más usado para el cálculo de los precios en las hipotecas: el euribor, en estos momentos situado en el 1,24 por ciento.
Curiosamente, este movimiento podría coincidir en el tiempo con el segundo hecho que agitará los cimientos del mercado de la vivienda en 2010: la subida del IVA, en el mes de julio. El impuesto que grava al inmueble de nueva adquisición pasa del 7 al 8 por ciento lo que podría traducirse en un mayor número de ventas en este primer periodo del año, a modo de efecto llamada.
Y una tercera circunstancia que podría modificar el comportamiento de vendedores y compradores de vivienda está determinada por el anunciado fin de las deducciones por pago de vivienda habitual, de hasta 9.000 euros por titular, que habían sido tildadas de desestabilizadoras del mercado de propiedad en nuestro país.
Un cóctel explosivo de elementos distorsionadores que tienen que tener en cuenta todos aquéllos que quieran comprar o vender este año. Y mientras, pocos cambios en la oferta hipotecaria de las entidades, que no parecen interesados en variar su catálogo de productos en este segmento. Sólo se descuelga Caja Madrid, con una nueva hipoteca joven al 0,49 por ciento.