La construcción de vivienda nueva en Estados Unidos bajó un 10,6% en octubre con respecto al mes anterior, la mayor caída desde enero, con lo que acumula una caída interanual del 30,7%, según informó el Departamento de Comercio.
En octubre se iniciaron las obras en 529.000 viviendas, frente a las 592.000 del pasado mes de septiembre y las 763.000 de octubre de 2008. Se trata el nivel más bajo de inicio de viviendas en los últimos seis meses y es peor de lo esperado por los analistas, ya que los analistas consultados por Bloomberg esperaban que se iniciaran 600.000 viviendas.
El número de permisos de construcción se redujo un 4 por ciento en octubre frente al mes anterior y en un año ha bajado un 24,3%. Estos datos reflejan las dificultades por las que aún atraviesa el sector inmobiliario estadounidense, cuya burbuja dio origen a la crisis económica mundial.
Es el nivel más bajo del indicador desde mayo. La caída sorprendió a los analistas, que preveían un leve aumento a 580.000 permisos acordados sobre un año.
Según el tipo de vivienda
La mayor caída ocurrió en los edificios de apartamentos, donde la construcción se redujo un 33,3% con respecto a septiembre. El comienzo de obras en viviendas unifamiliares, las más comunes en EEUU, bajó un 6,8% en comparación con el mes anterior.
El número de obras terminadas en octubre subió un 1,9% hasta las 740.000, una cifra un 29,9% inferior al volumen del mismo mes de 2008.
Los malos datos de octubre para el sector reflejan la incertidumbre en torno a una desgravación de 8.000 dólares para las personas que compran su primera vivienda, que estaba previsto que venciera a finales de año.
El Congreso amplió a principios de este mes el programa y aprobó una nueva ayuda de 6.500 dólares para quienes ya poseen una casa y se compren otra. Por ello, los analistas prevén que la construcción se recuperará en los próximos meses.
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