Economía/Fiscal.- Almunia afirma que la subida de impuestos en España es "necesaria" aunque pueda reducir el consumo

Reclama "mejorar el funcionamiento del mercado de trabajo" para evitar el paro de larga duración

BRUSELAS, 3 (EUROPA PRESS)

El comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, afirmó hoy que la subida de impuestos en España prevista en los presupuestos de 2010 es "lógica" y "necesaria" para frenar el aumento del déficit y de la deuda, aunque admitió que puede tener un impacto negativo sobre el consumo privado y amenazar así la recuperación.

"Que una subida de impuestos sobre el consumo puede repercutir sobre el consumo no es descubrir el Mediterráneo, es una cuestión obvia", dijo Almunia en rueda de prensa para presentar las previsiones económicas de otoño del Ejecutivo comunitario. Pero "dada la necesidad de ajustar y de consolidar las cuentas públicas en España, porque el déficit ha subido mucho y la deuda ha subido también mucho, me parece muy lógico que se utilice no sólo el lado de los gastos sino también el lado de los ingresos", agregó.

En sus previsiones económicas, la Comisión destaca que "algunas de las recientes medidas fiscales anunciadas en la ley de presupuestos de 2010, como la eliminación de devoluciones fiscales (en referencia a los 400 euros) y los incrementos del IVA, pueden tener también un impacto negativo en el consumo privado". Almunia rechazó como alternativa recurrir a la deuda porque, según explicó, la recuperación económica se traducirá en un aumento de los tipos de interés y una reducción de la liquidez disponible en los mercados de bonos o de deuda.

El comisario de Asuntos Económicos resaltó que España necesita "mejorar el funcionamiento del mercado de trabajo" para evitar que se consolide el paro de larga duración. "El paro de larga duración es un riesgo que tenemos en todos los países europeos. La experiencia de anteriores crisis es que, si no se adoptan las reformas del mercado de trabajo necesarias, ese paro de larga duración puede ser una realidad. Y eso supone un problema personal, un problema social y también una restricción económica muy grande para el crecimiento futuro", dijo.

"Hay que mejorar el funcionamiento del mercado de trabajo sin perder demasiado tiempo en la terminología. Porque discutiendo sobre términos no vamos a resolver el problema de los millones de parados que hay en Europa", resaltó.

De acuerdo con las previsiones económicas de Bruselas, el nivel de paro en España seguirá aumentando hasta alcanzar el 20,5% en 2011. Frente a ello, la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, asegura que la economía española podría empezar a generar empleo durante el segundo semestre de 2010. "Si el Gobierno español considera que se puede empezar a crear empleo en España antes, yo me alegraré mucho de que sea el Gobierno español el que tenga razón y que las previsiones de la Comisión se hayan equivocado", dijo, recordando que el Ejecutivo comunitario utiliza la información de que dispone y su metodología habitual.

El informe de Bruselas también señala que "un incremento en los impagos de hipotecas podría poner en riesgo la corrección de las balanzas de los bancos muy expuestos al sector de la construcción, lo que podría tener un impacto negativo en la economía real". Sobre esta cuestión, Almunia negó que "España esté retrasando la reestructuración del sistema financiero". "Creo que hace meses se aprobaron medidas muy importantes que están siendo puestas en aplicación", dijo.

El déficit público se disparará hasta el 11,2% del PIB este año y se mantendrá en torno al 10% en 2010 debido a la caída de los ingresos fiscales, al aumento de las prestaciones por desempleo y a las medidas anticrisis, mientras que la deuda aumentará del 39,7% en 2008 hasta el 74% en 2011, según los datos de Bruselas. Al ser preguntado por si aceptará la petición del Gobierno de ampliar un año, de 2012 a 2013, el plazo para reducir el déficit por debajo del 3% que marca el Pacto de Estabilidad, Almunia dijo que dará una respuesta "la semana que viene", cuando la Comisión presente su evaluación de las medidas adoptadas por los países expedientados por déficit excesivo, como España.

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