
El futuro consejero delegado del grupo español Ferrovial, Íñigo Meirás ha asegurado que, si la crisis económica perdura, será "complicado" mantener los actuales niveles de empleo de la empresa y ha puesto como límite el presupuesto de 2010 para "tomar medidas", si la situación se hace insoportable.
En una entrevista que publica hoy el periódico ABC, ha señalado que las constructoras están "aguantando" la coyuntura económica "sin realizar grandes despidos y recortando sólo las subcontratas", tras advertir que la empresa se debe a los accionistas.
Meirás se ha quejado de los retrasos en los pagos públicos, sobre todo, de los ayuntamientos donde el tiempo de cobro se ha duplicado desde enero, al mismo tiempo que ha apostado por la inversión en infraestructuras para superar la crisis, ya que "España dispone de proyectos" que pueden sustentar la recuperación.
"Entre AVE, carreteras, puertos y aeropuertos, existe una cartera de obra de más de 15.000 millones preparada para generar empleo en cuanto llegue la financiación", ha añadido.
El hasta ahora director general de Ferrovial, que pasará a ser consejero delegado la próxima semana, también se ha referido al reto que afrontará para "sacar a Ferrovial reforzada de la crisis" y ha valorado la nueva integración entre la compañía y su filial Cintra para "seguir creciendo".
Ha considerado que la fusión es buena porque en este caso "uno más uno suman más de dos" y ha confiado en que los inversores internacionales "valoren correctamente" esta unión y no afecte a la cotización de Ferrovial.
Ha anunciado que las ventas de las autopistas de Cintra en Chile y el aeropuerto de Gatwick, propiedad de BBAA, en el Reino Unido no son "ventas obligadas", por lo que "no venderemos" si no hay acuerdo en el precio.
"Mantenemos ambos procesos abiertos y somos positivos. En la venta de Gatwick hay un grupo mejor posicionado que sus rivales, aunque no puedo decir cuál porque esta circunstancia puede cambiar", ha insistido, tras añadir que valoran este activo en 1.600 millones de libras.
Por el contrario, se ha mostrado optimista sobre la venta de la sede del grupo que ha dicho podría producirse antes de final de año.
Sobre la continuidad de la inmobiliaria Hábitat, perteneciente en un 20% a Ferrovial, Meirás, ha añadido que "la situación depende del esfuerzo que la banca esté dispuesta a hacer", porque "la situación está abierta y puede acabar en una solución razonable o en concurso de acreedores".