
El desánimo global parece haber dado paso, en las últimas semanas, a nuevos aires de optimismo. El crecimiento de Alemania, Francia, Japón y los últimos indicadores procedentes de Estados Unidos permiten hablar de un cambio de signo en la situación económica mundial, un cambio de signo que, desgraciadamente, tardará en llegar a nuestro país.
En España, y aunque los últimos datos hablan ya de una leve desaceleración en la caída, tardaremos aún algún tiempo en vislumbrar la luz de la recuperación. A tenor de los resultados de la encuesta elaborada por InvesMarket para elEconomista, nuestro país permanece en estado crítico y las perspectivas para los próximos meses, aunque mejoran muy levemente, no permiten lanzar las campanas al vuelo.
Así, el 57,2% de los encuestados considera que el paro seguirá creciendo en los 12 meses siguientes. De hecho, el 81,5% cree que la situación del país se ha deteriorado notablemente en el último año, frente a un 5,6% que ve las cosas mejor y un 11% que no percibe cambios significativos.
Al preguntar por nuestro futuro económico, los mensajes de optimismo parecen abrirse tímidamente paso entre los hogares españoles. Así, ya sólo un 35,6% considera que las cosas empeorarán aún más, frente al 24,5% que piensa que irán mejor y un 30,7 que no cree que vaya a haber cambios.
Si nos fijamos en la perspectivas que tienen los hogares españoles sobre su situación, el 41% opina que en los últimos meses ha empeorado, el 54,7 ha permanecido igual y sólo un 3,7% considera que ha mejorado. Ahora bien, si nos fijamos en el futuro, a un año vista, el clima de los hogares también parece mejorar, aunque levemente: el 55,3% piensa que las cosas seguirán igual, 22,3% ve el futuro peor y ya un 13,1% se muestra optimista.
Ni compras, ni ahorro
La crisis económica ha azotado a España con especial virulencia. Los desequilibrios acumulados por nuestra economía han convertido la crisis financiera en una trampa mortal para nuestro país. Entre los síntomas más alarmantes está el frenazo experimentado por la demanda interna y, en este sentido, la encuesta no dibuja mejores perspectivas para el futuro inmediato.
Así, si el 46,5% de los ciudadanos encuestados piensa que no es un buen momento para hacer compras importantes y que éstas deberían aplazarse, los que piensan que, en unos meses, tampoco mejorará su gasto en compras alcanzan el 51,6%. Sólo un 4,2% piensa en gastar más en un futuro cercano.
Si las compras no mejoran, si no consumimos más, al menos podríamos estar corrigiendo el sobreendeudamiento de los hogares españoles. Pero tampoco parece ser así, al menos de forma notable. El 51,4% de los encuestados opina que no es un buen momento para ahorrar, frente a un 44,5% que cree que sí. De hecho, el 58% admite que no podrá ahorrar en los próximos meses, frente a un 38,9% que lo ve posible.
A este respecto, ante la pregunta de "¿cuál diría que es la situación de su hogar?", el 53,3% reconoce estar viviendo al día, que el dinero apenas le alcanza para llegar a fin de mes, frente a un 28,9% que asegura poder ahorrar un poco a pesar de la crisis económica.
La crisis del sector inmobiliario
En España, el estallido de nuestra crisis particular vino desencadenado por el desplome del sector de la construcción, unido al colapso financiero. En este sentido, considerando las respuestas dadas por los encuestados, no parece que la reactivación del sector vaya a ser inminente. De hecho, el 95,6% admite que no hay ninguna posibilidad de comprar una casa el próximo año.
Ni comprar, ni tampoco reformar. El 89,4 no piensa gastar dinero en realizar alguna reforma en su vivienda y sólo un 9,8% tiene previsto un gasto así.
Por último, otro de los grandes sectores afectados por el crack económico es el sector del automóvil. En el último año, éste ha sido objeto de multimillonarios planes de estímulo para intentar devolverle el pulso. Y parece reaccionar, de hecho, las ventas están mejorando.
Así, si con la vivienda los encuestados lo tienen casi unánimemente claro, con el coche las cosas pintan algo mejor. El porcentaje de los que no consideran posible adquirir un vehículo llega al 89%. Lo dicho, sólo algo mejor.