La grave crisis económica en EEUU parece haber superado lo peor tras las medidas adoptadas por el Gobierno y se ha fortalecido la confianza en la estabilidad, señala el FMI en un informe. Sin embargo, incide en que la recuperación económica será "gradual" y las autoridades podrían necesitar poner en marcha nuevas medidas de ayuda monetaria y fiscal.
La institución financiera señala que "si se materializan los riesgos a la baja", deberían considerar más facilidades de crédito y reforzar su compromiso de no endurecer su política monetaria. Además, estiman que también podrían ser usados "estímulos fiscales adicionales", aunque el principal objetivo debería ser la implantación de las medidas fiscales actuales y el control de su impacto.
Previsiones
En su análisis, el FMI revisa sus previsiones de crecimiento para el país. Así, calcula que este año el PIB estadounidense se contraerá un 2,6%, mientras que en 2010 registrará un leve aumento del 0,8%. Además, para este año prevé una tasa de desempleo del 9,3%, que se elevará al 10,1% el año próximo, mientras que calcula que la inflación quedará en un -0,3% este año y en 2010 se situará en el 1,4%.
La actividad económica "continúa debilitada" y las condiciones financieras "siguen presentando cierta tensión", explica el informe. Dichas tensiones, junto con el aumento del desempleo y la caída de los precios de la vivienda, frenarán la inversión y "también el consumo".
Por otra parte, considera que las perspectivas de crecimiento de los socios comerciales de EEUU se mantienen limitadas, lo que restringirá las exportaciones.
A medio plazo, uno de los principales desafíos será diseñar estrategias de salida para retirar gradualmente las medidas que apuntalaron el sistema financiero y el estímulo extraordinario de política monetario. A largo plazo, los retos abarcan el corregir las deficiencias de los mecanismos de supervisión y regulación financieras que posibilitaron la crisis actual, estabilizar las finanzas públicas y hacer frente a un contexto de aumento de los ahorros y crecimiento más lento.
En su análisis, los directores del FMI elogian las medidas adoptadas por el Gobierno de Barack Obama para contener la crisis. "Como resultado de las medidas de política macroeconómica cada vez más amplias y contundentes, la fuerte caída del producto económico parece estar llegando a su fin y se ha fortalecido la confianza en la estabilidad económica", sostienen.
Pese a ello, dado que persisten las grandes presiones financieras, "cabe esperar que la recuperación sea gradual", opinaron. El crecimiento potencial, advierte el FMI, podría mantenerse "muy por debajo" de las tendencias anteriores durante un periodo considerable.