
El Eurogrupo se suma a la petición que ya emitió hace casi dos meses la Comisión Europea y reclama a España su plan presupuestario para el próximo ejercicio. Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona han demandado este lunes a los gobiernos que no han presentado aún sus cuentas para el 2025, que lo hagan lo antes posible. Una lista de tres países en la que se encuentra España en una situación excepcional, pues es el único que no tiene un gobierno en funciones tras una convocatoria electoral.
En una declaración conjunta, los titulares de Economía de la eurozona han apuntado: "esperamos que se presenten lo antes posible los planes a medio plazo y los proyectos de planes presupuestarios pendientes". España, junto con Bélgica y Austria, son los únicos tres países del euro que todavía no han remitido sus planes presupuestarios a Bruselas. Si en el caso de España la difícil aritmética parlamentaria ha dificultado la concreción de unas cuentas para el próximo año, la justificación de los otros dos países radica en un gobierno en funciones y la convocatoria de elecciones.
"Una moneda compartida implica responsabilidades compartidas", resalta el comunicado. Por ello, el Eurogrupo la importancia de la aplicación "efectiva" de las nuevas reglas fiscales, que se empiezan a aplicar en 2025 y antes de cuya aplicación los países debían presentar sus planes fiscales y sus planes presupuestarios. El marco de gobernanza económica "facilita una estrategia de consolidación fiscal gradual, al tiempo que apoya la inversión y las reformas, y promueve un crecimiento económico sostenible, mejorando así la sostenibilidad fiscal en toda la zona del euro", apuntan los titulares de Economía en su declaración conjunta.
Los países debían presentar sus planes presupuestarios a la Comisión Europea antes del 15 de octubre. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, avisaba que el Gobierno se retrasaría en su entrega y justificaba tal dilación por el hecho de que Bruselas no quiere prórrogas presupuestarias, una condición que realmente se aplicaría a los Gobiernos en funciones y a los países en procesos electorales, como es el caso de Bélgica y Austria.
No ocurre lo mismo con el plan fiscal estructural, que el Gobierno envío al Ejecutivo comunitario el pasado 15 de octubre y que fija un objetivo de déficit del 0,8% para 2031. Hasta la fecha, faltan por entregar a Bruselas esta hoja de ruta a cuatro años, extensible a siete años, Alemania, Bélgica, Austria y Lituania.
Ya en el Eurogrupo de octubre, a escasos días de cumplirse el plazo límite del 15 de octubre, el anterior comisario de Economía, Paolo Gentiloni, avisaba a España de que la flexibilidad de la Comisión Europea es "limitada". Indicaba que tal flexibilidad se acotaba a una cuestión de días, en ningún caso semanas o meses. Además, ponía de relieve a la importancia de presentar, junto al plan fiscal, las cuentas para 2025, ya que el primer documento sin el sostén del segundo corre el riesgo de convertirse en papel mojado.
Política fiscal ligeramente contractiva
El Eurogrupo cambia su análisis de la orientación para la política fiscal del próximo año. Si en julio, los ministros de Economía y Finanzas del euro elevaban el tono respecto a marzo y pedían una política fiscal "contractiva" para el próximo ejercicio, el mensaje vuelve a relajarse y apunta en la misma dirección que en marzo, para que sea "ligeramente contractiva".
"La evaluación por la Comisión de los planes presupuestarios apunta a una orientación presupuestaria ligeramente contractiva en 2025 en la zona del euro, impulsada por la restricción del gasto público, junto con un crecimiento de la inversión pública. Esto es apropiado en la coyuntura actual, habida cuenta de los elevados niveles de déficit y deuda de la zona del euro y de la necesidad de apoyar el actual proceso de desinflación", ha indicado en su declaración conjunta el Eurogrupo.
Además, el Eurogrupo ve con buenos ojos que se produzca un mayor ajuste fiscal en aquellos Estados miembro que afrontan mayores retos fiscales. También ha mostrado satisfacción por que "la inversión pública de la zona del euro mantenga su tendencia al alza" y, añaden, "la inversión sigue siendo esencial para una economía competitiva y resistente".