
El examen en el Parlamento Europeo de la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, para convertirse vicepresidenta ejecutiva para una Transición Limpia, Justa y Competitiva y responsable de la cartera de Competencia de la Comisión Europea, ha estado marcado por la política nacional y, concretamente, por los reproches por su falta de responsabilidad ante la catástrofe natural derivada de la Dana en el Levante y sur del país. Unos reproches frente a los que la ministra para la Transición Ecológica ha pasado por encima de toda la polémica sobre la acción de Moncloa en la Dana y ha afirmado que "las alertas se emitieron en tiempo adecuado". Además, ha incidido en que la responsabilidad de la respuesta a la Dana corresponde al Ejecutivo valenciano de Carlos Mazón.
"En un país descentralizado como puede darse en Alemania, el gobierno nacional tiene la responsabilidad de las alertas meteorológicas y el flujo del agua en tiempo real y el resto es responsabilidad regional, como en otros estados descentralizados", ha indicado la aspirante a comisaria. Ha defendido así que "las alerta se emitieron en tiempo adecuado", para remarcar que el aviso había sido remitido por el Ejecutivo nacional a las 7 de la mañana.
Ribera ha evidenciado que mientras algunas entidades como universidades decidieron suspender su actividad "no fue el caso para otras entidades locales". Su aviso fue claro: "no tomar en serio las alertas" tiene "consecuencias catastróficas". En todo caso, ha emplazado la conversación a la próxima semana: "volveremos a esto. Iré al Congreso a Madrid la semana que viene".
La réplica se la dio a la pregunta formulada por la eurodiputada popular, Dolors Monserrat, que no solo ha criticado que Ribera compareciera ante la Eurocámara y no en el Congreso por sus responsabilidades por la Dana en Valencia, sino que le advirtió de que "la historia y quizás los jueces la juzgarán por su inacción e incompetencia". En un paso más, la eurodiputada popular afirmó que "este examen es innecesario. Hace quince días se enfrentó al examen de su vida en Valencia. Como actual ministra de Clima ha suspendido. Le correspondía haber evitado la tragedia porque es responsable de la prevención, preparación y respuesta de los desastres climáticos".
La jornada de evaluación de la aspirante a vicepresidenta de la Comisión Europea por parte de España arrancaba salpicada por la polémica. Antes de empezar la evaluación cambiaban los plazos. Quedaba postergada la votación de los coordinadores de la Eurocámara para la candidatura de Ribera, prevista para el martes tras la audiencia, y la totalidad de futuribles vicepresidentes de la Comisión Europea, en principio para la próxima semana.
No faltaron reproches, abucheos y descreimientos durante la comparecencia de la española. En una tanda de preguntas y respuestas coreada por abucheos, el eurodiputado de Vox, Jorge Buxadé, ha afeado a Ribera su inacción como catalizador de las inundaciones de las últimas semanas. "La falta de apoyo a los presupuestos hace complicado invertir en servicios públicos", replicó la aspirante española.
No escatimó el eurodiputado de extrema derecha en enumerar una lista de actuaciones bajo la responsabilidad de la ministra de Transición Ecológica, desde la información sobre el desbordamiento a la ejecución de las obras del plan hidrológico nacional. "Fue mala suerte que la crisis –la financiera del 2008- se llevara por delante la capacidad de inversión en España. La falta de apoyo a los presupuestos hace complicado invertir en servicios públicos. Recortar impuestos hace complicado disponer de recursos", ha argumentado Ribera.
La socialista ha abogado por evitar las palabras de reproche y por "reforzar la preparación, las alertas" para que las "personas puedan estar protegidas". En un paso más, ha criticado al eurodiputado de Vox que no hay "nada más peligroso que minar la credibilidad de las instituciones que nos alertan".
En el plano económico, Ribera se ha comprometido a simplificar el marco de "las ayudas de Estado, dando prioridad a las ayudas que más distorsionan la competencia". El objetivo es que este nuevo marco permita acelerar "el despliegue de las energías renovables, permitir la descarbonización industrial y garantizar una capacidad de fabricación suficiente de tecnologías limpias".