
El gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, tomará posesión oficialmente de su cargo este martes. El exministro lo hará respaldado por un Consejo de Gobierno con una aplastante mayoría de profesionales afines a la izquierda. Ninguna tendencia ideológica acumuló hasta ahora una representación tan amplia en este organismo directivo. Son un total de ocho nombres –si se incluye a Escrivá y a la subgobernadora Soledad Núñez– cercanos a los socialistas sobre un total de diez. A ellos debe sumarse Jordi Pons, designado por ERC para cubrir la cuota catalana. De este modo, solo Fernando Fernández fue nombrado a propuesta del PP.
El Consejo de Gobierno del Banco de España aprueba las directrices generales de funcionamiento del Banco. Liderado por Escrivá y Núñez, este órgano rector cuenta con seis miembros con mandato de similar duración (seis años), además de los responsables del Tesoro –Paula Conthe– y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) –Montserrat Martínez– que designa el Gobierno y ocupan el cargo durante la legislatura. En manos del próximo Ejecutivo estará la oportunidad de modificar o dar continuidad a la composición del Consejo.

De momento, la renovación de la cúpula que ha abordado Escrivá ha decantado la balanza hacia el ala socialista con la entrada de Soledad Núñez, exdirectora del Tesoro con el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, y Lucía Rodríguez, que proviene de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), donde trabajó ya bajo la presidencia del propio Escrivá. En esta oleada de nombramientos también ha saltado el nombre de Jordi Pons: el que está considerado como uno de los cerebros del relato económico del procés catalán ha sido elegido nuevo consejero del Banco de España en un pacto entre los socialistas y Esquerra Republicana.
Núñez, Rodríguez y Pons formarán parte del Consejo junto al asiento permanente de Judith Arnal, exjefa de gabinete de la exvicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, en su etapa como ministra de Economía. Otros nombres provienen también de la etapa de Calviño. Luis Servén fue nombrado por la ahora presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI) en 2021 y ocupará su cargo, al menos, hasta 2027. Carles Manera, ex consejero de Economía en Baleares, fue elegido en 2020. El economista Fernando Fernández es el único representante elegido por el PP y llegó al cargo en 2023.
Primeras diferencias y paridad
Las competencias del Consejo pasan por debatir las cuestiones relativas a la política monetaria y supervisar la contribución del Banco a la instrumentación de la política monetaria del Sistema Europeo de Bancos Centrales; aprobar las circulares del Banco de España; imponer las sanciones cuya adopción sean de su competencia; o adoptar los acuerdos precisos para el desempeño de las funciones encomendadas al Banco de España que no sean competencias exclusivas de la Comisión Ejecutiva.
El Consejo del Banco también tiene poder de ratificar los nombramientos de los directores generales de la institución y ya generó un choque precisamente con los nombramientos en el órgano rector y las direcciones generales tomados a comienzos de septiembre, alegando desde el PP la falta de transparencia en el proceso.
Una de las premisas de Escrivá al llegar ha sido dar continuidad a su política de nombramientos en términos de equidad entre ambos géneros, según explicaron desde la entidad tras las diferencias surgidas en algunos nombramientos. Lucía Rodríguez entró como consejera de la institución en sustitución de la nueva subgobernadora, que también releva a una mujer. Paloma Marín, por su parte, se incorpora a la alta dirección como encargada de un área de nueva creación, tendrá voz pero no voto en la Comisión Ejecutiva del supervisor. En ese mismo departamento le acompaña Inés Calderón, que trabaja junto a Escrivá desde su etapa de ministro en dos carteras.
Hernández de Cos, herencia de Rajoy
El último presidente del Gobierno antes de las últimas legislaturas del PSOE, Mariano Rajoy, apuró sus últimos días al mano para cerrar la elección de Pablo Hernández de Cos como gobernador del supervisor, en junio de 2018. La segunda de a bordo, Margarita Delgado, tuvo el consenso del PP y del PSOE. Una vez cumplido su mandato en junio, la valoración entorno al exgobernador ha sido muy positiva y, en cierta medida, ha ejercido de oposición y de asesor en los momentos más delicados, reflotando la reputación del Banco de España y potenciando el servicio de estudios.
Durante su mandato, de hecho, propuso una receta económica para afrontar la salida de la pandemia y alejar las viejas políticas de austeridad que apoyó la visión de miembros del Gobierno como el propio Escrivá, frente a la prudencia con el gasto que defendían Calviño o María Jesús Montero. De Cos también sirvió como oposición al tratar temas comprometidos como la subida del salario mínimo, la presión fiscal o la reforma de pensiones de Escrivá.