Las perspectivas sobre la economía china han mejorado, a pesar de las caídas en la electricidad y en el acero y los riesgos que siguen planeando sobre la industria manufacturera, según los economistas consultados por Bloomberg.
Según ellos, la tercera economía del mundo crecerá un 7,5% este año, frente al 7,1% que pronosticaban en febrero. De momento, en el primer trimestre, China creció un 6,1%, el menor ritmo en al menos 10 años.
Los expertos mantienen que los últimos signos de debilidad no indican que la recuperación se vaya a colapsar debido al incremento de las inversiones y los préstamos y la subida de las ventas minoristas.
Estos mismo economistas esperan que el país asiático crecerá un 6,8% en el trimestre actual, cuando antes esperaban un 6,6%. Sin embargo, el crecimiento se acelerará hasta el 8% en el tercer trimestre y alcanzará el 9% en el último trimestre del año.