Economía

El Eurogrupo advierte de los riesgos de la fragmentación comercial para la eurozona

  • Avisa de los costes económicos que supondría para los Veinte
  • Las exportaciones equivalen a más del 60% del PIB de la UE, frente al 5% de EEUU y el 38% de China.
  • Insta a avanzar en la integración del mercado único y en la unión de mercado de capitales
El ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner y el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe.
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El bloque traza su estrategia de competitividad en un entorno altamente volátil y de creciente polarización. Es la antesala del debate que tendrá la próxima semana en la cumbre extraordinaria de Líderes de la UE en Bruselas. Por lo pronto, los ministros de Economía y Finanzas del euro (Eurogrupo) han advertido de los riesgos económicos que entraña un escenario internacional de fragmentación comercial para la economía zona euro.

"Las perturbaciones en el comercio global vienen de la evolución económica y de las intervenciones de los gobiernos en todo el mundo", ha introducido el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe para detallar que la fragmentación comercial puede implicar costes económicos "en particular para la zona euro y en su interacción con la cadena de valor global".

El director gerente del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), Pierre Gramegna, ha subrayado que la "competitividad es clave para tener éxito en los mercados exteriores" y ha evidenciado que, en términos de comercio exterior, Europa se encuentra en una "posición difícil": las exportaciones con terceros países equivalen a más del 60% de su Producto Interior Bruto (PIB), frente al 5% que representa en Estados Unidos y el 38% para China. Por lo que, en caso de fragmentación comercial, "Europa se verá más impactada por definición".

El alza de las tensiones geopolíticas y de los precios de la energía ha tenido un impacto en las dinámicas comerciales, según ha explicado el comisario de Economía, Paolo Gentiloni, que ha dispuesto la necesidad de la zona euro de buscar un equilibrio entre apoyar la producción, mejorar la seguridad económica y utilizar instrumentos comerciales.

Fue la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, la que llamó el año pasado a reducir las dependencias comerciales excesivas respecto a terceros países, mirando muy especialmente a China. Clamaba por "reducir riesgos" pero no por romper los lazos o desacoplarse emulando el término en inglés decoupling. En este sentido, Gentiloni ha subrayado que el desacople de países terceros "no está sucediendo y, seguramente, no suceda".

Ante tal coyuntura el irlandés ha puesto sobre la mesa la necesidad de fortalecer el mercado único y de avanzar en la unión de mercado de capitales. "Creo que somos conscientes de que la zona euro se beneficia de una fuerte integración en la economía global. Estamos convencidos de que el mercado exterior y la inversión ayuda a impulsar la productividad y los estándares de vida", ha indicado Gentiloni.

En una reunión en Luxemburgo, los titulares de Economía de los Veinte han puesto el foco en la política comercial en un escenario geopolítico de creciente fragmentación. La UE llama a reducir riesgos en sus relaciones comerciales después de la lección aprendida, recientemente, con el gas ruso. También por las roturas en la cadena de suministro con China que evidenció la pandemia y dejó la industria de la automoción en stand by a la espera de microchips procedentes del gigante asiático.

Ganar competitividad y la autonomía estratégica se erigirán como dos pilares de la estrategia de la UE para la próxima legislatura. A su llegada al encuentro el comisario de Economía explicaba a la prensa que el diálogo se centraría en la competitividad, pero con un ángulo internacional: "consideramos la globalización como marco", aseguró. Seguidamente el italiano abogó por cadenas de suministro "más seguras", aunque no es proclive al proteccionismo.

Las bases del debate

El Eurogrupo ha debatido este jueves un documento elaborado por la Comisión Europea en el que se pone en evidencia los riesgos que entraña la fragmentación del comercio para la eurozona. Aunque, con la fórmula contraria, una mayor integración del mercado único puede ser uno de los puntales que confiera a las Veinte mayor competitividad.

Según el documento, en contra de los países del euro no solo juega la falta de integración, frente a otros mercados como el estadounidense. Los altos precios de la energía restan competitividad a las empresas y la necesidad de diversificar las relaciones comerciales para ganar seguridad en la cadena de suministro, pero a la vez debe reforzar su cooperación internacional y sus redes de acuerdos comerciales.

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