Fijar que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) corresponda siempre al 60% del salario medio del país, reforzar la hucha de las pensiones con 20.000 millones durante los próximos cuatro años y elevar los permisos de maternidad y paternidad a 20 semanas. Son las nuevas promesas electorales que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha avanzado este miércoles y con las que pretende reeditar su cargo en Moncloa tras las elecciones del 23 de julio.
Las tres medidas han sido avanzadas en una conversación organizada por el PSOE entre Sánchez y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. La primera pasaría por modificar el Estatuto de los Trabajadores para que el salario mínimo siempre sea el 60% del salario medio del país "sea cual sea el Gobierno", siguiendo la recomendación de la Carta Social Europea.
En la última legislatura, han recordado, el SMI se ha incrementado en un 47% hasta situarse en lo 1.080 euros en 14 pagas actuales que cumplen prácticamente con la recomendación de Bruselas. Según han defendido, un mayor salario mínimo "termina generando dinámicas positivas de eficiencia económica".
En concreto Escrivá ha destacado que unos mayores salarios en la parte baja del rango salarial presionan al mercado hacia ganancias de productividad y hacia mejores puestos de trabajo. El ministro ha puesto como ejemplo de esto a las economías nórdicas, que han acometido subidas del SMI "muy agresivas" y han desembocado en la generación de estímulos e incentivos a economías "más productivas y con mejores trabajos".
5.000 millones a la hucha de las pensiones cada año
De igual manera, Sánchez se ha comprometido a nutrir con aproximadamente 20.000 millones de euros el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, la conocida como 'hucha' de las pensiones, para que esta alcance los 45.000 millones de euros en el año 2030.
Los fondos procederán del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que este año ya ha permitido dotar a la hucha de las pensiones de 3.000 millones de euros adicionales. El objetivo de Sánchez es que esta cifra se sitúe en un promedio de 5.000 millones anuales.
De vaciar la hucha de las pensiones... A RECUPERARLA y AMPLIARLA.#LaMejorEspaña pic.twitter.com/IYgu4mGfPa
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) June 21, 2023
El mecanismo lleva en vigor desde el 1 de enero de este año. Consiste en una cotización adicional que en la actualidad es del 0,6%, pero que subirá progresivamente hasta el 1,2% en 2029, a un ritmo de una décima por año, siendo un punto porcentual a cargo de la empresa y los 0,2 puntos restantes a cargo del trabajador. Esta sobrecuota se mantendrá en el 1,2% de 2030 a 2050 y podrá aumentar de manera automática si el gasto en pensiones sobrepasa el 15% del PIB.
Los ingresos del MEI irán destinados a engordar el Fondo de Reserva de las pensiones. La Seguridad Social prevé que llegue a acumular hacia mediados de los 2040 entre 120.000 y 130.000 millones de euros, el doble de los 68.000 millones de euros con los que contó en 2011, la cifra más alta hasta la fecha.
El objetivo principal de los fondos, que se irán desembolsando entre principios de la década de 2030 y hasta los primeros años de 2050, es afrontar las tensiones financieras derivadas de las jubilaciones de los 'baby boomers'.
Cuatro semanas más de baja parental
El programa electoral del PSOE también incluye la ampliación del permiso por tener un hijo de 16 a 20 semanas, tanto para la madre como para el padre. La extensión se haría a través del trabajo a tiempo parcial. Según han explicado, la idea es que "de la semana 17 a la 20 sea con trabajo a tiempo parcial".
La medida, en este caso, busca potenciar la conciliación y la corresponsabilidad aumentando el tiempo de cuidado de los hijos recién nacidos más allá de las 16 semanas actuales.