Ha sido para él una legislatura más complicada que para el resto de los presidentes autonómicos y no solo por la gestión del Covid, o porque ha tenido que gobernar con un cuatripartito, sino porque hace apenad dos años que superó un cáncer que estuvo a punto de acabar con su carrera política.
Javier Lambán (Ejea de Caballeros 1957 ), es uno de los pocos barones socialistas que han levantado su voz no solo contra el independentismo, sino contra el trato de favor que le está dando el gobierno de España. Sus amigos dicen de él que es un hombre honesto, leal y sensato que siempre va de cara y busca el consenso. De hecho, cuando estás en su presencia, no se le cae de la boca la palabra pacto y tal vez en eso está el secreto de su éxito para haber conseguido la cuadratura del círculo, o lo que es lo mismo, gobernar con IU-Podemos, el PAR y CHA sin sobresaltos. "Hay una gran lealtad de los cuatro socios porque desde que planificamos la investidura dejamos claro que lo que nos unía es Aragon por encima de lo paridos políticos y lo hemos cumplido", señala.
Es plenamente consciente que el próximo domingo se la juega y apela al voto útil que él denomina "acuerdo de amplia base" por encima de las preferencias ideológicas. Dice que su objetivo es el pleno empleo y abre la puerta a bajar los impuestos.
¿Usted será el próximo presidente de Aragón?, porque las encuestas pronostican cambios…
En el PSOE vamos a trabajar para continuar al frente del gobierno. Pensamos que a Aragón le ha sentado bien nuestro gobierno en los últimos 8 años, y nos postulamos para seguir. Sabemos bien qué tenemos que hacer y hemos dado con las claves, con las fórmulas del éxito, tanto en el terreno económico como en el social.
"Somos una de las comunidades autónomas que más han crecido en PIB e inversión"
¿Por qué dice que sus fórmulas son de éxito en el terreno económico?
Porque los datos lo avalan. En estos 8 años Aragón ha sido la segunda Comunidad Autónoma que más ha crecido en términos de empleo, una de las que más ha crecido en riqueza, en PIB y en inversión social. Veníamos de ser la segunda Comunidad Autónoma que más gasto social había recortado y en estos 8 años estamos en el tercer o cuarto lugar en incremento del gasto y en inversión sanitaria, educativa y de servicios sociales.
Pues gestionar un multipartito con cuatro socios no debe de ser fácil. ¿Su opción es repetir experiencia?
Nosotros planificamos el pacto de investidura también con las discrepancias. Todo sabíamos nuestras posiciones diferentes, por ejemplo, en política hidráulica, la nieve o cuestiones medioambientales. Dentro del Gobierno había dos opiniones, la del PSOE y PAR, y por otra parte de la Podemos y CHA. Ha habido desavenencias, pero nadie se ha llevado las manos a la cabeza porque existían los mecanismos para resolverlas. Hemos sido los 4 socios muy leales, ciñéndonos a que lo que nos unía era Aragón. Hemos intentado que todo el ruido, la crispación y la polarización que existe en Madrid no contaminara la política aragonesa. Hemos salvado muy bien los 4 años avanzando en todas las políticas públicas y el futuro no está escrito.
Las encuestas apuntan que Aragón Existe puede tener la llave. ¿La mala relación que usted ha tenido con ellos puede ser un hándicap llegado el caso?
Con Teruel Existe he tenido una relación basada en aceptar con deportividad las críticas que ellos me han hecho y esperar que ellos hicieran lo mismo. Les he reprochado que han tenido siempre una visión negativa de lo que ha ocurrido en estos 40 años. Pero comparto con ellos una perspectiva progresista de los temas. Tomás Guitarte es un hombre progresista y de izquierdas, y su electorado también, por lo que es muy improbable que sus bases se alineen a formar una mayoría parlamentaria con el PP, y sobre todo con Vox. La única mayoría posible de Jorge Azcón sería PP, Vox y Teruel Existe, y esa mayoría no la veo. Para Teruel Existe sería muy complicado explicar un pacto de esta naturaleza.
¿De verdad cree que si gobierna el PP en Aragón se instalaría una crispación y un enfrentamiento similar al de la política nacional?
Nosotros con nuestros aciertos y nuestros errores hemos demostrado que tenemos una visión particular y propia de la política. Por eso el lema de la campaña es "Aragón con voz propia", mientras que el PP carece de proyecto propio para Aragón. Sólo actúan de correa de transmisión del PP de Madrid. Todos los días aparecen por aquí líderes del PP nacional para alinear a Azcón con Feijóo, pero de Aragón no dicen nada.
"Hemos sido los cuatro socios muy leales, ciñéndonos a lo que nos unía, que es Aragón"
¿Cuando usted habla de un acuerdo de amplia base a qué se refiere exactamente?
Me refiero a un acuerdo de amplia base con los electores. Aspiro a un apoyo electoral no circunscrito al ámbito de la izquierda sino de todos aquellos aragoneses que anteponen a su Comunidad frente a sus preferencias ideológicas. He demostrado que puedo mantener pactos con todas las fuerzas políticas del espectro, excepto con Vox.
Si gana, ¿qué prioridades económicas tendrá para esta legislatura?
Se abre un panorama económico francamente esperanzador. Somos la segunda Comunidad Autónoma con menos paro, y tenemos compromisos de inversión de distintos empresarios de la Comunidad y de fuera de ella que podrían llegar a generar en torno a 20.000 empleos en los próximos años. Hemos resuelto el problema de la desaparición de la economía del carbón en las cuencas mineras con anuncios empresariales que triplicarán el empleo que se generaba en el carbón.
¿Qué tipo de anuncios?
Me refiero a proyectos empresariales como el de BonÀrea relacionado con la agroalimentación que genera 4.000 empleos, y otros proyectos muy potentes en el terreno de la logística que sólo en Zaragoza en los próximos años van a generar 600.000 empleos. Simplemente con la materialización de esos proyectos estaríamos no sólo liderando las cifras del empleo sino alcanzando el pleno empleo, que es una de mis aspiraciones, que si gobierno lo voy a conseguir. Además, queremos reforzar la digitalización de la economía y la automoción. Diría que las perspectivas de la economía aragonesa son francamente esperanzadoras.
"Hemos convertido el diálogo social en un elemento de sosiego interno y un imán de empresas"
En el programa electoral usted habla de pacto por el crecimiento, productividad, internalización y de sostenibilidad. ¿Esos serán los pilares de su gestión?
Nuestra principal palanca es crear un entorno favorable para la economía. Hemos convertido el diálogo social en un elemento productor de sosiego interno y un imán de atracción de empresas. A los inversores les seduce venir a Aragón porque tienen garantizada la paz social, y hay un clima de estabilidad política y social muy alto. Hemos hecho modificaciones normativas para agilizar los trámites, que es una de las grandes dificultades que a veces se encuentra la inversión. Vamos a tratar de ser la Comunidad Autónoma que más avance en digitalización. Estamos haciendo esfuerzos importantes en inversión en I+D+i, conscientes de que el talento va a ser el elemento realmente disruptivo, en el momento que defina el éxito y el fracaso de los países en los próximos años. Queremos insistir en la culminación de infraestructuras ferroviarias que refuerce nuestro liderazgo logístico en España. Además, hemos hecho con sindicatos, empresarios y otros actores implicados un ambicioso plan de formación profesional para los próximos años porque creemos que vamos a tener que dar capacitación profesional a muchos miles de aragoneses.
¿La bajada de impuestos se ha convertido en un arma electoral? ¿Cuál es su política impositiva?
Los impuestos y la política fiscal no son un fin en sí mismo. La fiscalidad autonómica no tiene nada que ver con las previsiones de los empresarios para invertir en una u otra Comunidad. La fiscalidad tiene que ver con el modelo de sociedad que uno quiere y con los servicios públicos que se pagan con impuestos. Yo dije que no iba a subir los impuestos, pero en la práctica lo que he hecho en las dos legislaturas es bajarlos, cuando he entendido que bajar impuestos no suponía problemas para la financiación de los servicios públicos. He bajado el impuesto de sucesiones y también en el mes de diciembre hice una revisión del IRPF. El PP se pasa la vida en la oposición predicando la bajada de impuestos, y cuando llega al gobierno, como hizo Rajoy, lo suben si no le cuadran las cuentas.
¿Usted los va a bajar otra vez?
Iré a las elecciones con el compromiso de no subir los impuestos, y con la puerta abierta a bajarlos si esto no pone en quiebra la financiación de los servicios públicos.
Una curiosidad, ¿a usted qué le ha parecido la subida salarial pactada por empresarios y sindicatos y que en la foto no hayan querido que esté el Gobierno?
Tengo una muy buena relación con Pepe Álvarez y con Antonio Garamendi, y aplaudo el acuerdo para la subida salarial. Celebro el pacto y creo que hubiera tenido más fuerza política con la presencia del Gobierno, pero en eso no entro. Los sectores fundamentales son sindicatos y empresarios, y ellos han tomado la decisión y yo la respeto.
"Si gobierno, una de mis aspiraciones es tener pleno empleo y lo voy a conseguir"
Es curioso porque usted apuesta por un impulso del sector agroalimentario mientras que los socios del Gobierno de Pedro Sánchez llaman "capo" a Mercadona…
Esa actitud denota una manera de entender el éxito empresarial totalmente equivocada. Yo no me canso de agasajar en el discurso público y en el privado a los empresarios aragoneses, considerándolos un pilar fundamental del progreso de la Comunidad. En el caso de Mercadona en absoluto concurren las circunstancias para que Roig se merezca ese tipo de calificativos por parte de Podemos, que son completamente desafortunados.
¿Usted cree que la vara de medir del Gobierno de España ha sido la misma con Aragón que con Cataluña o el País Vasco?
No. Una de las características de la política española que más lamento es la falta de partidos que sean capaces de formar mayorías con el PSOE y con el PP cuando estos no tienen mayoría absoluta. Depender de los nacionalismos creo que ha traído efectos muy negativos para España en todos los niveles, y ha introducido desigualdades. Los nacionalistas no tienen freno, son insaciables. Echo en falta que PP y nosotros no seamos capaces de llegar a acuerdos y que por no haber partidos bisagra la gobernabilidad de España dependa cada vez más de los extremos. De un lado de fuerzas que no creen en la Constitución y en España, y de otros de fuerzas retardatarias, reaccionarias y oscuras como Vox, y en definitiva de los populismos.
¿Las elecciones autonómicas son unas primarias de las generales? Porque todas las encuestas apuntan a que tanto Feijóo como Sánchez se la juegan…
Hay quien las quiere convertir en primarias, y yo tengo el empeño de que estas elecciones no sean unas primarias de las generales. Me dejaré la piel en que las elecciones sean autonómicas, tratando de que la política nacional interfiera e influya lo menos posible.
¿Pedro Sánchez y las siglas del PSOE le quitan a usted votos o se los dan?
Para mí Aragón está, por supuesto, por encima de mi partido. Pero soy del PSOE y si decidiera esconder las siglas tendría que abandonar el partido, cosa que no estoy dispuesto a hacer. Yo no tengo ningún complejo, primero para discrepar si es necesario con el Gobierno de España, ni tampoco para enseñar las siglas de mi partido.
"Depender de los nacionalistas creo que ha traído efectos muy negativos"
Oiga, ¿ser un verso suelto, una voz crítica con el sanchismo le da votos?
No me considero un verso suelto. Tengo una visión del socialismo y de España que se ha mantenido desde hace muchos años. Admito que mi manera de ver la política y de ver el socialismo en este momento dentro de mi partido está en minoría, pero eso no es algo nuevo en la historia del PSOE, donde siempre ha habido mayorías y minorías. Pedro Sánchez tiene el apoyo del partido para hacer las políticas que está haciendo, pero yo, en alguna de esas políticas, no estoy de acuerdo.
Por ejemplo, no está de acuerdo en la posición que se ha tomado tras saber que Bildu había incluido terroristas en sus listas electorales, ¿no?
Yo me reafirmo en que el PSOE tiene que romper cualquier tipo de relación con Bildu. Mi partido no tiene nada que ver con una formación política que incluye a terroristas con delitos de sangre. Yo no he cambiado de opinión sobre ese tema.
También usted advirtió que la Ley del Sí es sí de Podemos era un error y permitiría salir de la cárcel a violadores con delitos graves…
La Ley del Solo sí es sí era una ley bien intencionada, que se convirtió en un artefacto jurídico pésimo, y ha tenido unos efectos absolutamente demoledores. Le dije públicamente al presidente del Gobierno que apoyaba su iniciativa para modificarla. Y aplaudí que llegáramos a un acuerdo con el PP en eso, igual que pienso que tendríamos que llegar a más acuerdos con los populares.
¿Qué tipo de acuerdos? ¿A qué se refiere?
Hay un ámbito político en el país que va más allá de lo ideológico, entre quienes somos constitucionalistas y quienes no lo son. Y desde luego hay muchas afinidades dentro del ámbito constitucionalista que son más fuertes que las que pueden existir por afinidades ideológicas.
¿Meter en el mismo paquete la sedición y la malversación fue darse un tiro en el pie? Porque hasta Europa nos ha advertido que la malversación es corrupción…
Yo me opuse rotundamente a esas dos modificaciones legales, y dije que tendrían que ir justamente en la dirección contraria. Se deberían haber endurecido las penas frente a los sucesos como los que ocurrieron en Cataluña en el otoño de 2017.