
Cada persona cuenta con una situación financiera propia, pero existe una serie de hechos que indican la posibilidad de que se produzcan impagos en préstamos y otras operaciones. Es lo que afirma Leslie Tayne, fundadora y abogada jefe de Tayne Law Group. Si bien es normal tener ciertas deudas, el riesgo se halla en la posibilidad de que estas se descontrolen.
Tayne Law ayuda a sus clientes con problemas de endeudamiento. Tras 20 años de trabajo y experiencia, la fundadora ha reconocido 5 señales que podrían indicar la pérdida de control de una persona sobre su déficit.
Gastos en vivienda por debajo del 50%
Una regla comúnmente compartida dice que los costes del hogar nunca deben ser superiores al 30% de los ingresos brutos. Con la subida de los precios del alquiler y la inflación la situación es más difícil de sobrellevar, por lo que Tayne advierte de que el porcentaje no supere el 50%. Y es que a más dinero se destine a la vivienda, menos se tendrá para hacer frente a otras obligaciones.
Explica que pasar de ese 50% sería un punto de inflexión que, una vez superado, podría provocar el endeudamiento del individuo. "Cuando analizo el presupuesto de un cliente, y me percato de esos gastos en el hogar rozando el 50%, entonces entiendo a la perfección su situación y los desafíos que van a surgir para él", comenta Tayne.
Se deniegan las transferencias de saldo
Una transferencia de saldo permite trasladar una deuda entre tarjetas de crédito. Algunos bancos ofrecen este servicio sin intereses, normalmente durante un tiempo, para así atraer a nuevos clientes.
Esta posibilidad, aunque no está disponible para todo el mundo, puede suponer una ayuda para personas endeudadas. Pero tanto aquellas con baja capacidad crediticia, como otras con una deuda en su tarjeta actual que exceda el límite de la nueva, podrán ver denegada su petición de transferencia de saldo. Este escenario es la segunda señal de alarma para Tayne.
Muchas tarjetas de crédito
Las tarjetas de crédito permiten realizar compras en el momento, aunque suelen tener un interés elevado. Es común que alguien tenga más de una, y si se encuentra en a situación de tener que ponerlas en equilibrio, Tayne comenta entonces que ello "implica dificultades con el gasto e incapacidad para mantener el ritmo de pago de las facturas".
Pero algunos individuos superan la decena de estas herramientas, algo que para la abogada es otro motivo para hacer saltar las alarmas. "Todo lo que supere ese número puede sugerir que están teniendo lugar un montón de cosas", comenta, refiriéndose a que estos usuarios suelen tener dificultades para amortizar sus deudas.
Falta de transparencia con los gastos
Otra señal de alarma es el caso de aquellas personas que ocultan sus gastos los demás, especialmente a su pareja. Esto alerta de un posible desenlace con problemas financieros. "Es muy normal que acudan a mi miembros de matrimonios, comentándome que sus parejas no saben lo que sucede", comenta.
Da igual que sean excusas o razones altruistas, tales como "querer proteger a la pareja o sentir vergüenza", pues podrían evitar que las dos personas trabajasen unidas para solventar el problema financiero. Dichos problemas pueden comenzar de manera poco perceptible, pero Tayne asegura que suelen descontrolarse y complicar más la situación de endeudamiento.
Conocimiento insuficiente
Si bien no es necesario que el individuo esté siempre al tanto de las cifras que conforman su deuda, el extremo opuesto, el no tener ni siquiera una idea aproximada, es algo que pone en riesgo las finanzas personales. Y es que la mayoría de personas son asalariadas, por lo que sus ingresos son fijos y tienen un límite claro a la hora de poder pagar sus deudas.
"Una de las primeras preguntas para mis clientes es cuánta deuda tienen, y casi todos me hablan de una cantidad inferior a la que realmente es", comenta Tayne. La abogada recomienda empezar contabilizando los gastos que más destacan en la cuenta. También es factible pedir un informe de crédito, gratuito una vez al año, y que sirve para resaltar las cantidades exactas adeudadas, en cada cuenta, así como su situación y el historial de pagos.