
Las proyecciones macroeconómicas del XXXI Informe Loyola Economic Outlook (LEO) presentadas hoy por el catedrático de Economía de la Universidad Loyola, Manuel Alejandro Cardenete, y el secretario general de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Luis Fernández-Palacios, señalan que el PIB de España podría crecer un 1,5% en 2023, lo cual supone una revisión al alza de medio punto porcentual respecto a las proyecciones del informe anterior. Para el caso de Andalucía, el PIB crecerá un 1,4% en 2023. Por segundo año consecutivo el crecimiento andaluz estaría por debajo de la media nacional, pues en 2022 se quedó en un 5,3 por un 5,5 nacional.
El catedrático de Economía de la Universidad Loyola Manuel Alejandro Cardenete ha apuntado que "el crecimiento andaluz pasa a ser inferior, ligeramente, que el español, como ya marcó en el último trimestre de 2022. Y esto no se producía desde 2019. Esperemos que no sea tendencia y dejemos de converger con España".
El profesor Cardenete explica que el turismo no compensa el enfriamiento del resto de sectores, especialmente el agroalimentario (sequía, crisis de costes) y los fondos Next Generation aún no están llegando al tejido productivo con la suficiente intensidad.
Las estimaciones del Loyola Economic Outlook indican un cierre anual de la inflación en Andalucía de un 3,6% en 2023 y de un 2,5% en 2024.
Situación compleja
Luis Fernández Palacios, señala que la situación "sigue siendo compleja, con una coyuntura inflacionista en costes y la ralentización del crecimiento, que ha llevado a un sensible deterioro de los márgenes empresariales y de la propia situación financiera de las empresas, que además han visto empeorar las condiciones de acceso al crédito".
Para Fernández-Palacios, "todo ello impone prudencia en decisiones de política económica, -más en año electoral-, que pueden dar lugar a efectos no deseados, como cierres de empresas y pérdida de empleo a medio plazo. Debemos insistir, por tanto, en la trascendencia de apuntalar, a través del adecuado diálogo y el necesario consenso, la competitividad y capacidad de generar valor en nuestras empresas, que aún transitan por un contexto volátil, en una coyuntura de recuperación que se alarga más de lo previsto, no exenta de riesgos. Son necesarios estímulos que refuercen la confianza, impulsen la actividad y consoliden el empleo".
Los datos
Los datos sobre la evolución de los principales indicadores macroeconómicos de Andalucía para los próximos meses siguen en las líneas trazadas en el anterior trimestre. En cuanto a las exportaciones, y según los últimos datos hechos públicos por Extenda, Andalucía cerró el balance exportador de 2022 con 42.958 millones de euros en ventas, el registro más alto de su historia desde que existen datos homologables (1995), una cifra que supera en más de 8.000 millones el último récord, de 34.552 millones, alcanzado en 2021, gracias a un crecimiento de las ventas del 24,3% interanual, superior al de la media nacional (22,9%).
En lo que respecta a la creación de empleo, según los datos de la Seguridad Social, el número de afiliaciones en diciembre de 2022 fue de 3.338.757, cifra que corresponde a un incremento del 1,2% respecto a diciembre de 2021.
En cuanto a los ocupados, el 2022 se cerró con un incremento del 3,5%, consecuencia directa del buen comportamiento del mercado laboral andaluz en los últimos meses del año. Sin embargo, las previsiones para 2023 están a la baja con respecto a previas estimaciones (0,8% comparado con un 2,2% previamente estimado). En la misma línea se sitúa el pronóstico para 2024, según el cual la cifra de ocupados aumentaría un 1,1%.
Más optimistas son las previsiones para la tasa de paro, que sigue con su tendencia descendente registrada tras la pandemia. De hecho, se ajustan ligeramente a la baja las previsiones para 2022 (19% con respeto al 19,4% previamente indicado). En 2023, se prevé que la tasa de paro andaluz se sitúe en el 18%, y en el 16,9% en 2024.