
La UE aumenta la presión contra el Kremlin con un nuevo paquete de sanciones. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha anunciado este miércoles el noveno paquete contra Moscú que incluye la prohibición de vender drones a Rusia, de invertir en el sector minero ruso y añade tres nuevos bancos en la lista de sancionados, después de que esta misma semana haya entrado en vigor el tope de 60 dólares a las exportaciones por barco de petróleo de Rusia y el embargo al crudo ruso en el bloque.
Bruselas ha propuesto en la novena tanda cortar el acceso a Rusia a todo tipo de drones y vehículos aéreos no tripulados. Además, incluye la prohibición de las exportaciones directas de motores de drones a Rusia y a terceros países que se los podrían suministrar a Rusia, como es el caso de Irán.
Esta ronda de sanciones contra Rusia incluye restricciones para otras tres entidades bancarias rusas, entre ellas el Banco Regional de Desarrollo de Rusia al que se prohíben por completo las transacciones en un intento por "paralizar la máquina de efectivo de Putin", ha argumentado Von der Leyen.
También contempla medidas contra el sector energético y veta las inversiones en el sector minero ruso. Además, incluye restricciones y controles de exportaciones a nuevos productos como los químicos, agentes nerviosos, componentes electrónicos y tecnológicos que puedan ser usados por la maquinaria de guerra del Kremlin.
Así esta nueva tanda de sanciones incluye 200 nuevos individuos y entidades vinculados al Kremlin, entre ellos las fuerzas armadas rusas, oficiales individuales, empresas industriales del sector de defensa.
También incluye a miembros de la Duma estatal y el Consejo de la Federación, ministros, gobernadores y partidos políticos. "Esta lista incluye figuras clave en los brutales y deliberados ataques con misiles de Rusia contra civiles, en el secuestro de niños ucranianos a Rusia y en el robo de productos agrícolas ucranianos", ha argumentado la presidenta del Ejecutivo comunitario.
La novena lista de sanciones incluye cuatro canales rusos que dejarán de operar, así como sus plataformas de difusión.
"Este paquete se suma a la prohibición de importación a la UE del petróleo ruso transportado por mar que entró en vigor esta semana. Así como el tope del precio mundial del petróleo acordado entre el G7", ha declarado la presidenta de la Comisión Europea.