
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha señalado este domingo que el nuevo impuesto a la banca que ha propuesto el Gobierno nacional "es una derrama" y que no solo se repercutirá en los ciudadanos sino que lo tendrá que devolver el siguiente Ejecutivo si los tribunales dan la razón a los recursos que se presentarán una vez aprobada la ley.
En este aspecto, en una entrevista concedida a El Mundo, ha señalado que la cuantía extra que tendrán que abonar las grandes entidades financieras una vez la legislación entre en vigor acabará afectando al bolsillo de los ciudadanos mediante "subidas de céntimos en las comisiones o incrementos en los tipos de los préstamos o una retribución nula para los depósitos o dando menos crédito". Esto a pesar de que el Gobierno ha afirmado que prohibirá en la ley que el pago se pueda repercutir en los clientes de los bancos.
Por otra parte, con respecto al nuevo impuesto a las energéticas, no ha mostrado su disconformidad porque "es evidente que tienen resultados importantes", pero cree que habría que fomentar que inviertan: "Si les ponemos un impuesto, hagamos una exención del 99% del mismo si invierten en España", propone.
Por otra parte, ha criticado severamente la gestión económica de un Gobierno que es el único "que no ha tenido que cumplir ninguna norma económica porque desde 2020 tiene levantados los límites de déficit, deuda y regla de gasto, y el BCE le ha comprado toda la deuda".
"Somos el país que peor lo ha hecho en política económica de la UE", ha incidido, subrayando que "hoy las familias son un 11% más pobres y las medidas que implementó (el Gobierno) desde abril no han podido frenar el IPC", apunta.
En este aspecto, ha condenado que Sánchez ha "metido a cada español un pufo en deuda de 6.000 euros" al tiempo que "el Gobierno no ha adoptado ni una sola medida de ajuste en su gasto político". "Tenemos la mayor recaudación de nuestra historia con el empobrecimiento más intenso de las familias en los últimos 35 años, recuerda.