
La subdirectora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, ha apoyado las medidas para paliar la alta inflación y los efectos del coste de la energía que está tomando el Gobierno español, si bien considera que deben ser medidas "de tipo temporal", advirtiendo de que si los precios energéticos siguen altos en el tiempo finalmente será "necesario que los precios también lo reflejen y que la gente ajuste el gasto al nuevo entorno".
La subdirectora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, ha apoyado las medidas para paliar la alta inflación y los efectos del coste de la energía que está tomando el Gobierno español, si bien considera que deben ser medidas "de tipo temporal", advirtiendo de que si los precios energéticos siguen altos en el tiempo finalmente será "necesario que los precios también lo reflejen y que la gente ajuste el gasto al nuevo entorno".
En una entrevista concedida al diario El País, Gopinath descarta una "reducción general de los impuestos a las empresas", dado la situación macroeconómica del Estado: "un déficit fiscal en torno al 7% del PIB [6,87% en 2021] y una deuda pública de alrededor del 120% [118%]".
En esta línea, la subdirectora gerente del FMI ha defendido la reciente propuesta del organismo de crear un "impuesto temporal sobre beneficios empresariales extraordinarios" para aquellas compañías que más han ganado durante la pandemia. A ello ha sumado tres iniciativas para aumentar la cuantía y eficacia de los gravámenes a las grandes firmas: aplicar el impuesto mínimo global del 15% acordado por la OCDE, "compartir información sobre los grupos en paraísos fiscales" y, en tercer lugar, imponer tasas sobre las emisiones de dióxido de carbono.
Con respecto a la situación general, Gopinath subraya que la compleja situación actual hay que enfrentarla con resliencia, pero es algo que hay que construir "con más comercio global, no menos". "Nos preocupa que los países se dividan en bloques, iría en detrimento de la prosperidad e, inmediatamente, también de la inflación", ha señalado.
En este aspecto, ha recordado las dos grandes amenazas para la economía global. Por una parte, la inflación, donde ha destacado el auge de los precios en EEUU, que supone "una gran amenaza para el país y para el resto del mundo, porque la política monetaria de EEUU afecta en todas partes".
Por otra parte, más centrada en Europa, la crisis energética: "Creemos que Europa (...) podría reemplazar dos tercios del suministro ruso [de gas] con fuentes alternativas que ayudarían a evitar la carestía en verano, pero si ese problema sigue en invierno, el coste del crudo sería mucho mayor. En ese escenario, Europa sería la región más afectada y calculamos una reducción del PIB del 3%, además de la que ya hemos calculado", advierte.
En todo caso, Gopinath hace hincapié en que "lo más importante para la economía sería terminar esta guerra" en Ucrania, y que desde el organismo están colaborando para paliar la crisis humanitaria que sufre el país como consecuencia de la invasión de Rusia: "Nos estamos moviendo muy rápido para entregar 1.400 millones de dólares en financiación de emergencia", apunta.