MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
La ley que regula la intermediación crediticia provocará un considerable encarecimiento del precio del servicio al consumidor y puede entorpecer la labor que pretende regular, según afirmó hoy La Agencia Negociadora de Productos Bancarios.
Según esta empresa, la ley encarecerá "muy ostensiblemente" la factura final a pagar por el consumidor, en contra del principio inspirador y del espíritu de la propia norma, y puede llegar a hacer inviable la labor del intermediario.
La firma explica que, dado que es obligatorio presentar tres ofertas vinculantes, el consumidor tendrá que hacer frente a los gastos derivados de la correspondiente tasación inmobiliaria en el caso de que la intermediación consista en una financiación hipotecaria.
Esta situación cambiaría, como es lógico, si cualquiera de las tasadoras reconocidas por el Banco de España pudiese ofrecer la valoración de un inmueble a cualquier entidad financiera que estudiase una operación de crédito.
No obstante, lo que ocurre actualmente en la práctica es que cada entidad decide cuáles de las tasadoras homologadas por el Banco de España son validadas por ellos y, por el momento, nadie puede obligarlas a trabajar con una o con otra.
Además, al presentarse tres ofertas, una de ellas será, por fuerza, mejor que las otras dos, así que, si la propia ley reconoce la capacidad de asesoramiento del intermediario financiero y la valora como tal, siempre se presentará la oferta que más convenga al tomador del servicio, alega la firma.
La Agencia Negociadora había solicitado al Parlamento el desarrollo de una regulación normativa de la actividad de la intermediación de crédito, y proponía un mínimo de capital social o la obligatoriedad de contar con certificaciones externas de calidad, medidas que han quedado fuera de la norma.
