Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, se ha visto desbordado por el apoyo que la organización le ha ofrecido antes de iniciarse la Asamblea de la patronal de este año. Antes de decir una sola palabra, los asistentes en el salón se pusieron en pie y le otorgaron un largo aplauso de más de dos minutos de duración. Garamendi reaccionó con lagrimas mientras se le decían "no llores presidente".
"Muchísimas gracias. Lo comentaremos cuando termine mi discurso al cierre de la Asamblea, pero ha vivido una injusticia. Cuando no se quiere interpretar lo que uno dice, no hay nada que hacer", explico Garamendi ante los casi 490 vocales que asisten en estos momentos vía telemática a la Asamblea anual.
Se ha referido así, a la mala interpretación que se hicieron de las declaraciones que realizó en una radio la semana pasada de la que trascendió solamente que los indultos serían bien recibidos si servían para normalizar las relaciones en Cataluña.
Sacadas de contexto
"Se sacaron estas palabras de contexto, en una larga entrevista de más de media hora", ha dicho. Garamendi se ha mostrado especialmente dolido porque siempre ha defendido la unidad de España, el cumplimiento de la ley, la Constitución y una defensa inquebrantable de la Monarquía.
Y remarcó que de nada sirven las aclaraciones que ha hecho todos estos días, tras esa mala interpretación de sus declaraciones. "Hablaremos claro de lo que siempre hemos dicho en la CEOE", en referencia a la conferencia con la que cerraría la Asamble.
Juntos, todos los territorios
Y Garamendi ha cumplido si palabra. Al finalizar su discurso, ha vuelto a insistir para aquellos que le quieren escuchar y no maltinterpretar que "juntos, todos los territorios, llegaremos más lejos", ha terminado diciendo diciendo. Pero antes, ha insistido por undécima vez en los tres principios que mueven la acción de la CEOE: Independencia, Sentido de Estado y Lealtad institucional.
Para finalizar su intervención, el presidente de la CEOE ha explicado nuevamente su posición sobre los indultos. "De verdad que os agradezco muchísimo vuestro apoyo, de verdad. Porque he pasado unos días, sinceramente muy malos en un tema que considero profundamente injusto".
"Los que me conocen, como vosotros, saben lo que he defendido siempre en la CEOE, lo que nos une en la CEOE", ha dicho. "Trabajamos con independencia, decimos y defendemos lo que pensamos, pero siempre con sentido de Estado, con lo que queremos para nuestro país, aunque nos podamos equivocar" ha comentado, para recordar que en cualquier caso, siempre explican sus posiciones.
Un sentido de Estado que, ha matizado Garamendi, significa trabajar dentro del marco de la Constitución, en el régimen de la Monarquía parlamentaria como un gran modelo de país. "Hay que decir que España está entre los 20 países más democráticos del mundo y que de ellos, ocho o nuevo son monarquías parlamentarias", ha remarcado.
Lo que significa, según ha opinado el presidente de los empresarios españoles, estar sujetos al imperio de la ley y la defensa de un Estado de Derecho. "Lo que pase en España depende de la soberanía popular, de lo que decida el conjunto de los españoles", ha dicho delante de los casi 500 vocales representantes de las organizaciones incluidas en le CEOE. Y ha vuelto a cargar contra aquellos que han preferido quedarse con la interpretación de sus declaraciones. "Aunque haya gente que se empeñe en decir lo que no decimos", ha dicho.
Unidad ha sido una palabra reiterada por Garamendi a lo largo del discurso de cierre ante la Asamblea de la CEOE. "La unidad es que nos da la fuerza en la CEOE, para sacar adelante a España".
Pero, siempre con lealtad institucional, ha insistido. "Es la clave, la colaboración institucional, y nosotros seguiremos trabajando en esta línea, hasta donde podamos llegar, aunque finalmente no se alcancen los acuerdo", ha concluido.