Nueva York
La Cámara Alta de Estados Unidos ha esclarecido una de las incógnitas que pesaban sobre el proceso de impeachment contra el ex presidente, Donald Trump. Según ha determinado el Senado, el segundo juicio político al que se enfrenta el republicano es constitucional y valido. Despejando así el camino para que comiencen los argumentos para determinar si éste incitó a la turba que asaltó el Capitolio el pasado 6 de enero.
Tras cuatro horas de debate entre los demócratas encargados del impeachment en la Cámara de Representantes y del equipo de defensa de Trump, el Senado votó con 56 votos a favor y 44 en contra para determinar que el proceso es constitucional pese a que el funcionario ya no esté en el cargo.
"El Senado continuará con el proceso judicial", señaló el senador demócrata Patrick Leahy, quien preside el proceso, tras el recuento de votos. El senador Bill Cassidy, de Luisiana, uno de los seis republicanos que se unieron a los 50 demócratas para votar a favor del juicio, fue el único que cambió su parecer respecto a la última vez que se planteó la cuestión en dicha Cámara semanas atrás.
Cabe recordar que el mes pasado, 45 de los 50 republicanos del Senado votaron a favor de una moción para desestimar el juicio por considerar inconstitucional.
Sin embargo, los responsables del impeachment a Trump en la Cámara de Representantes respondieron el lunes que "la evidencia de la conducta del presidente Trump es abrumadora" y "no tiene ninguna excusa o defensa válida para sus acciones". Para condenar a Trump, los demócratas necesitan que al menos 17 republicanos se unan a ellos.
El miércoles, los responsables demócratas de la Cámara de Representantes y los abogados de Trump tienen previsto comenzar a presentar sus argumentos a favor y en contra del artículo de impeachment en sí, que acusa a Trump de incitar la violencia en el Capitolio.
La estrategia de defensa de Trump estará basada en la libertad de expresión acusando a los congresista demócratas de querer instigar un "teatro político".
