Los nueve gestores en la Cámara de Representantes del juicio político contra el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentaron el martes un escrito de casi 80 páginas en el que justificaron el cargo de incitación a la insurrección del republicano el pasado 6 de enero, cuando una turba de sus partidarios asaltó el Capitolio. Con el objetivo de impedir la certificación de los votos del Colegio Electoral, el violento episodio provocó cinco víctimas mortales.
Los demócratas alegan que Trump y sus aliados trataron de deshacer su derrota electoral del pasado 3 de noviembre acusando, sin pruebas, que había una conspiración demócrata masiva para robar las elecciones. Por aquel entonces, el equipo del presidente saliente intentó sin éxito que los tribunales avalaran su causa, algo que no llegó a buen puerto. Cuando dichos esfuerzos fracasaron, se ncitó el ataque al Capitolio, según el briefing presentado.
"La responsabilidad del presidente Trump en los sucesos del 6 de enero es inequívoca", insistieron los gestores del impeachment. "Si provocar un motín contra una Sesión Conjunta del Congreso después de perder unas elecciones no es un delito impepinable, es difícil imaginar qué lo sería", aseguraron.
El segundo juicio político contra Trump en el Senado comenzará la próxima semana. La jornada del martes se postula como la fecha límite para que los encargados del proceso en la Cámara de Representantes presentaran su informe sobre el juicio y para que el equipo legal del expresidente presente una respuesta inicial al impeachment, que se oficializó el pasado 13 de enero.
Para ser condenado, dos tercios del Senado deberían encontrar culpable de las alegaciones a Trump, es decir, al menos 17 republicanos tendrían que votar con los 50 demócratas para potencialmente inhabilitarlo y así evitar que vuelva a ocupar un cargo público en el futuro. Cabe recordar que, en una votación de prueba, sólo cinco senadores republicanos apoyaron a los demócratas la semana pasada en su objetivo por declarar culpable al republicano.
Se espera que el nuevo equipo legal del ex presidente argumente que el juicio es inconstitucional porque Trump ya no está en el cargo y que su discurso del 6 de enero antes de que la turba atacara el Capitolio no incitó a la violencia y estuvo protegido por la Primera Enmienda.
"Esto es la militarización política del proceso de destitución",alegó el abogado de Trump, David Schoen, en Fox News el lunes por la noche. "No usamos nuestras preferencias políticas para derribar la Constitución".