
Los morados contarán con cinco representantes en el Gobierno de coalición
Con el futuro del Gobierno de coalición atado gracias al apoyo de los independentismos, los detalles que restan de la formación del Ejecutivo se van conociendo, al menos por la parte de Unidas Podemos. Fuentes parlamentarias han confirmado a elEconomista que en el nuevo Gabinete, que se dará a conocer la próxima semana una vez Pedro Sánchez haya sido investido presidente del Gobierno este martes (salvo catástrofe política), habrá cinco miembros morados: Pablo Iglesias, Irene Montero, Yolanda Díaz, Manuel Castells y Alberto Garzón. Sin embargo, lo cierto es que las competencias que finalmente ocuparán están rebajadas respecto a lo que reclamaban los morados en el verano.
Cabe recordar que precisamente en julio la investidura fue fallida, entre otras razones, porque los morados denunciaron que el PSOE solo les ofrecía ministerios menores y con escaso valor. Y es que Unidas Podemos tenía por entonces la aspiración de hacerse con algunas competencias que estaban en manos de los ministerios de Hacienda y Economía, por ejemplo. De hecho, siempre habían despreciado la oferta socialista de quedarse al cargo de un ministerio de Sanidad o uno de Vivienda, al considerarlos vacíos de funciones.
Sin embargo, los de Pablo Iglesias han tenido que desistir en sus pretensiones. Ya sea porque el propio Sánchez no cediera o porque, como ya ha comentado el propio secretario general de Podemos, reducir sus pretensiones era una condición sin la cual no habría podido producirse el Gobierno de coalición, al final sus aspiraciones quedan rebajadas a un vicepresidencia tercera para Iglesias – por detrás de Carmen Calvo y Nadia Calviño, vicepresidentas primera y segunda– y unos ministerios cuyas competencias todavía son desconocidas, pero que parecen muy lejos de las pretensiones que un principio tuvieron los podemitas.
Quiniela completa
El último nombre confirmado para formar parte del bando de Unidas Podemos dentro del Consejo de Ministros ha sido precisamente el de Manuel Castells, que será el responsable de un futuro Ministerio de Universidades, algo revelado por La Vanguardia y confirmado por fuentes del Congreso. Sería la aportacion de los Comunes al Gobierno de coalición, en un puesto que habría sido decidido por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Castells es sociólogo y economista, y enseñó durante 24 años en la Universidad de California de Berkeley. Así mismo, es catedrático de Sociología en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y es autor de 26 libros, como La era de la información o La galaxia Internet.
Esta figura se suma al resto de nombres que ya se han venido confirmando desde que Sánchez e Iglesias firmaron el preacuerdo de gobierno dos días después de sus peores resultados en las elecciones generales del 10 de noviembre. El secretario general del Podemos, como ya es sabido, será vicepresidente y estará al frente del área social del Ejecutivo, supervisando las cuatro ministerios morados.
Su portavoz parlamentaria Irene Montero será la ministra de Igualdad, competencia que todavía sigue en manos de Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno en funciones. Esto, por cierto, dará lugar a una situación inédita dentro de la democracia española y desde muchos siglos antes: Iglesias y Montero serán la primera pareja oficial que formará parte del mismo gabinete ministerial con cargos de alto rango, con la correspondiente concentración de poder que ello conlleva.
Por otro lado, Yolanda Díaz será la ministra de Trabajo, uno de los grandes logros de Unidas Podemos. Sin embargo, el departamento que dirija esta abogada gallega también estará rebajado respecto a sus condiciones actuales. No contendrá las competencias de la Seguridad Social y el manejo de las pensiones, como venía pasando hasta ahora. Todavía se desconoce a qué departamento irán a parar (se valoran Hacienda o Economía) o si la Seguridad Social tendrá ministerio propio, algo que no está descartado todavía.
Un ministerio para Garzón
Finalmente, el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, también tendrá su propio ministerio, lo cual significa que el número de departamentos en esta legislatura crecerá respecto al presente mandato de Sánchez. Concretamente, tendrá en sus manos un departamento sui generis creado para la ocasión: Consumo. Las fuentes consultadas admiten que las competencias que tenga no serán de relevancia y asumen que tendrán bajo nivel, en comparación con el resto de sus homólogos en el gabinete ministerial. En cualquier caso, recalcan que tendrá el control de las políticas respecto al juego, uno de los caballos de batalla de los morados.
Sobre el futuro de Pablo Echenique, uno de los jefes de la negociación con el PSOE, una posibilidad que gana cada vez más enteros es que pueda ser el portavoz parlamentario de la formación en sustitución de Irene Montero.