
La minoría republicana en el Senado podría obstaculizar el voto del gigantesco plan de reactivación económica que defiende el presidente Barack Obama, advirtió el domingo un influyente senador del partido. Los republicanos podrían recurrir a un procedimiento que requiere al menos 60 sufragios para que se proceda al voto, lo que bloquearía el texto.
Sin una profunda modificación del plan valorado en 819.000 millones de dólares, en lo que se refiere a las reducciones de impuestos y del gasto público, los republicanos podrían recurrir a un procedimiento que requiere al menos 60 sufragios para que se proceda al voto, lo que de facto bloquearía indefinidamente el texto, afirmó el senador Jon Kyl (Arizona, suroeste), número dos del partido en el Senado.
"Creo que estamos todos de acuerdo en que se necesitarán 60 votos para la adopción del proyecto de ley, lo que a fin de cuentas llevará a una obstrucción", declaró en una entrevista a la cadena de televisión Fox News.
Un republicano en Comercio no cambiaría nada
Altos responsables de Partido republicano afirmaron el domingo haber obtenido garantías de que no cambiaría el equilibrio político en el Senado si un republicano fuera nombrado secretario de Comercio por el presidente estadounidense Barack Obama.
El Senador republicano de New Hampshire (noreste) Judd Gregg podría ser designado como secretario de Comercio el lunes por Obama, aunque los republicanos descartaron una maniobra política de este tipo.
"El Senador Gregg me ha asegurado que si esto sucediera (su nominación a Comercio), esto no cambiaría el equilibrio en el Senado", afirmó el líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell.
Deben convencer a dos repúblicanos
Para evitarlo, los demócratas, que cuentan actualmente con 58 escaños contra 41 del lado republicano, tendrían que convencer a dos de sus adversarios, ya que un escaño sigue en suspenso debido a un recurso post electoral.
"No queremos retrasar la adopción del plan de reactivación, entendemos la urgencia de la situación", añadió sin embargo el senador Kyl, quien explicó que según los republicanos "este plan parte de bases erróneas" para salvar una economía que sufre la peor crisis desde los años 30.
La Cámara de Representantes adoptó la semana pasada el proyecto de ley sin incluir a la minoría republicana en los debates y rechazando todas las enmiendas de la oposición. Todos los republicanos de la Cámara votaron en contra a pesar de los intentos de persuasión de Obama.
Obama aumenta la presión
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aumenta la presión sobre los legisladores para que aprueben en los próximos días el plan de estímulo que considera indispensable para hacer frente a la crisis económica.
El plan, dotado de 819.000 millones de dólares (unos 640.000 millones de euros) y que esta semana comenzará a verse en el Senado, resultó aprobado el pasado miércoles en la Cámara de Representantes, aunque sin un solo voto a favor de la oposición republicana.
Para su aprobación en el Senado, el plan -que Obama asegura que permitirá crear o salvar más de tres millones de empleos- necesita el respaldo de al menos sesenta de los cien integrantes de esta Cámara, cuando los demócratas cuentan con 58 votos.
Desde su llegada a la Casa Blanca, hace casi dos semanas, Obama ha cortejado a los legisladores republicanos para que apoyen la medida, que destina cerca de 275.000 millones de dólares (214.700 millones de euros) a rebajas de impuestos y cerca de medio billón (390.400 millones) a proyectos de infraestructura, educación y energía, entre otros.