El tour mundial continuo que vive la industria del automóvil toca ahora en Shanghái, en uno de sus conciertos más señalados, dada la incidencia cada vez mayor del mercado chino en el mundo del automóvil. Y una de las principales novedades que tendrán lugar en el Shangái Motor Show es el primer prototipo eléctrico de Skoda, la marca checa del emporio Volkswagen, denominado Vision E. | Las tres claves del interior del Vision E.
Hablamos de un SUV cupé de cinco puertas, con una autonomía máxima de 500 kilómetros y que alcanza un nivel 3 de conducción autónoma: toma decisiones en atascos, entra en modo piloto automático en autopista, permanece centrado en su carril, ya sea en rectas o en curvas ligeras, realiza adelantamientos y busca él solito plazas de aparcamientos gratuitas, para luego aparcar o desaparcar también de forma independiente. Y todo ello gracias a un buen número de sensores y cámaras repartidos por todo el vehículo.
El diseño eminentemente futurista del Vision E viene acentuado, como es norma del segmento, por una habitabilidad que va creciendo a medida que se presentan nuevos modelos. La generosa distancia entre ejes (2.850 milímetros) permite crear un interior realmente espacioso. En el prototipo que se presenta en Shanghái destaca la ausencia de espejos retrovisores exteriores, que supuestamente son sustituidos por pantallas al efecto en el cuadro de mandos. Un futuro que llegará, por supuesto, pero que quizá es todavía demasiado avanzado, por lo que la futura versión de producción del Vision E contará sin duda con los entrañables retrovisores analógicos de toda la vida.
Los dos motores eléctricos que monta el Vision E permiten, además de los referidos 500 kilómetros de autonomía, una velocidad máxima de 180 kilómetros por hora.
Con el Vision E Skoda da su primer paso para no perder comba con el resto del mercado a la hora de adoptar unas tecnologías, la eléctrica y la autónoma, que han llegado para quedarse. Según fuentes de la marca, en el año 2030 un 15% de los vehículos nuevos podrán conducirse de forma completamente autónoma. Skoda comenzará a electrificar su gama con el lanzamiento del Superb con motor híbrido enchufable. El primer vehículo cien por cien eléctrico puro de la firma del grupo Volkswagen llegará en 2020. Y cinco años después, Skoda contará con hasta cinco modelos cien por cien eléctricos en su gama.
