La firma checa tiene preparado, para finales de año, el lanzamiento del nuevo Skoda Octavia. Llegará en sus dos variantes, berlina y familiar Combi, con un diseño renovado y mucha tecnología aplicada a la conducción y al infoentretenimiento. Sus precios aún no se conocen, pero serán, sin duda, su mayor reclamo frente a la competencia generalista.
En Skoda se refieren a él como el corazón de la marca. Y no es para menos, ya que es, de largo, el modelo más vendido. Las claves de su éxito quizá haya que buscarlas en el aprovechamiento del espacio, el equipamiento y la puesta en escena, que es más que buena en todos los casos y forma un cóctel que se vende a precio razonable.
Como modelo estrella no puede permitirse el lujo de relajarse, así que toca ponerse las pilas y pasar por quirófano para comenzar el segundo ciclo de vida de la generación actual, que lleva ahora tres años en el mercado. Los cambios del nuevo modelo se aprecian en el diseño exterior, con unas líneas simplificadas, sobre todo en la parte delantera. Las grupos ópticos del frontal aparecen ahora divididos en dos secciones que pueden incorporar tecnología full-LED como opción. El logo de la marca ha ganado protagonismo y, en líneas generales, el morro es más poderoso, ancho y ofrece mayor carácter.
El espacio disponible en esta nueva versión sigue siendo uno de los más grandes en su categoría. Tanto la berlina como la versión familiar ofrecen 1.782 milímetros de espacio interior y 73 milímetros de espacio para las piernas en los asientos traseros. Los maleteros son de 590 y 610 litros, respectivamente, y con los asientos traseros plegados alcanzan los 1.580 y 1.740 litros. Para el Nuevo Octavia, en su versión berlina por primera vez se dispone del portón trasero de accionamiento eléctrico.
En materia de tecnología llegan nuevos sistemas de infoentretenimiento (Swing, Bolero, Amundsen y Columbus), con pantallas de hasta 9,2 pulgadas, puerto WLAN y la posibilidad de incorporar un módulo de tarjeta SIM con sistema LTE para lograr una conexión a internet lo más ágil posible.
Si hablamos de dispositivos de ayuda a la conducción, el protagonismo es para el asistente de remolque, la protección predictiva de peatones o la alerta de tráfico trasero. Elementos, todos ellos, nuevos en el Octavia y reservados hasta hace bien poco a modelos pertenecientes a segmentos superiores.
Las soluciones Simply Clever, tan típicamente Skoda, han aumentado con elementos como la llave personalizable que permite a múltiples usuarios guardar sus propios reglajes del vehículo, el volante calefactable, las mesas plegables en los respaldos de los asientos delanteros, los soportes para botellas que facilitan su apertura con una mano y, en la versión familiar, una linterna extraíble en el maletero.
La oferta mecánica la componen varias opciones gasolina y diésel. Sus cilindradas van de los 1,0 a los 2,0 litros, con potencias que parten de los 84 CV y llegan hasta los 184 CV. Para prácticamente todos los motores del nuevo Octavia, está disponible una transmisión DSG de seis o siete velocidades, además de la caja de cambios manual. Los 1.8 TSI y 2.0 TDI, además, tienen la posibilidad de ir dotados de un sistema de tracción integral. Un elemento destacado del chasis es el Control Dinámico de Chasis (DCC), que permite al conductor regular las características de la dirección y los amortiguadores en los modos Comfort, Normal y Sport.
El nuevo Skoda Octavia en su versión berlina y familiar estará disponible en los primeros mercados a partir de finales de año. Las entregas empezarán a principios de 2017. En España, los primeros pedidos se podrán realizar a partir de finales de este año y las primeras unidades llegarán en febrero de 2017.