El Salón de Pekín va a dar para mucho en esta edición 2018 que mañana mismo abrirá sus puertas ante la atenta mirada del publico asiático. Aunque quizá los no asiáticos también debamos estar atentos a las novedades que allí se presenten, pues son muchas, variadas y no exclusivamente para el mercado oriental. Para muestra, el Vision Mercedes-Maybach Ultimate Luxury, un SUV de grandes dimensiones que, como su propio nombre indica, lleva el lujo por delante.
Lo curioso de este todocamino es que su carrocería, lejos de los diseños habituales, parece la de una gran berlina pero con ruedas sobredimensionadas y suspensiones elevadas. Una berlina con techo redondeado y de estilo coupé, cuza zaga queda rematada con una superficie recta de maletero. Esto es algo poco habitual en el mundo todocamino, pero parece una decisión muy consciente por parte de Mercedes para salirse así de ese camino marcado en el que todos los modelos de un segmento parecen prácticamente iguales.
En el frontal del Vision Mercedes-Maybach Ultimate Luxury destaca su enorme parrilla de lamas verticales, que le da gran personalidad. También llaman la atención los faros, con tres secciones cuadradas de LED en su interior, que recuerdan irremediablemente a los del deportivo Mercedes-AMG Project One. Las entradas de aire en los laterales y en la parte inferior del morro son claramente protagonistas y dan un toque de agresividad al conjunto.
En la vista lateral destaca esa silueta tan curiosa que comentábamos unas líneas antes y los cromados que figuran en inserciones varias (tiradores de las puertas, taloneras, sobre los pasos de rueda… Son llamativas, también, las llantas multirradio estilo turbina, que, a juzgar por las proporciones del coche, parecen tener un diámetro realmente grande, probablemente por encima de las 22 pulgadas.
Tanto el techo panorámico como la luna trasera del Vision Mercedes-Maybach Ultimate Luxury están divididos en dos secciones, quizá buscando esa distinción una vez más, mientras la parte trasera destaca por la curiosa forma de sus pilotos, que transmiten una sensación neo-retro a la vista bastante especial. No sabemos hasta qué punto se podrían mantener estos rasgos en un futuro modelo de producción, pero lo cierto es que este concept es tremendamente llamativo a la vista en su forma original.
El interior es muy Mercedes-Benz gracias a elementos como la doble pantalla de la instrumentación/consola, que enlaza con los modelos de última hornada de la marca, ya presentes en el mercado. Eso sí, la casi total ausencia de controles y botones, el gran túnel central que individualiza los cuatro asientos y el tapizado en un color blanco inmaculado dejan a la vista que se trata de un prototipo.
El SUV que veremos en el Salón de Pekín "Auto China 2018" mide 5,260 mm de largo, 2,110 mm de ancho y 1.764 mm de alto. Un coche de grandes dimensiones que, por cierto, se propulsa mediante cuatro motores eléctricos que rinden un total de 750 CV de potencia. La autonomía supera los 500 km y, según aseguran en la marca, gracias a la recarga de corriente continua basada en el estándar CCS se pueden obtener 100 km de autonomía en 5 minutos de carga. Carga que puede ser mediante cables o por inducción.