La firma automovilística Subaru obtuvo un beneficio neto en los seis primeros meses de su año fiscal, que comienza en abril, de 85.000 millones de yenes (unos 640 millones de euros al cambio actual) lo que significa un descenso del 48% respecto al mismo periodo en el 2016, según informa la compañía en un comunicado.
TOKIO, 6 (EUROPA PRESS)
Esta disminución en sus resultados se explica en parte por los costes derivados del caso de los 'airbags' defectuosos del proveedor Takata, que supuso para la japonesa un impacto negativo que asciende hasta los 81.300 millones de yenes (algo más de 612 millones de euros).
Por su parte, la facturación de la compañía en dicho periodo creció un 6,9%, hasta los 1,6 billones de yenes (cerca de los 12.700 millones de euros) debido al aumento de las ventas en Japón en un 14,9%, hasta los 328.000 millones de yenes (2.470 millones de euros) y el crecimiento de los ingresos en el resto del mundo un 5,1%, hasta los 1,3 billones de yenes (10.230 millones de euros).
Por otro lado, el beneficio operativo de la compañía nipona en los seis primeros meses ascendió hasta 212.100 millones de yenes (casi 1.600 millones de euros), lo que supone un incremento del 1,7% con respecto a los mismos meses del ejercicio fiscal anterior.
El número de vehículos vendidos se situó de abril a septiembre de 2017 en las 531.000 unidades, un 3,8% más que en los seis primeros meses del año fiscal 2016-2017. Destaca el aumento de las ventas en Japón en un 21%, ya que la disminución de las ventas de vehículos 'mini' ha sido compensada por las ventas de modelos como el Subaru XV.
La compañía nipona espera cerrar el año actual con "buenas" cifras. Prevé terminar su año fiscal en marzo de 2018 con unos ingresos totales de 3,3 billones de yenes (más de 24.840 millones de euros), lo que supondría un 1,6% más que el año pasado. Estas cifras permitirían, según Subaru, obtener un beneficio neto de 207.000 millones de yenes (1.558 millones de euros), lo que representaría una reducción del 26,7%.