Abre bien los ojos porque no verás hoy -ni en muchos días- un descapotable más apetecible que este Aston Martin DB11 Volante. Como si de una obra de arte se tratase, esta variante que deriva del DB11 Coupé sale a escena para derretir la mirada de los amantes del diseño sobre ruedas. Y es que, si algo sabe hacer Aston Martin, es precisamente eso, lograr que cualquiera que admire sus modelos caiga rendido ante ellos.
Pero el nuevo Aston Martin DB11 Volante no sólo llama la atención por esos rasgos que dejan a la vista el nuevo lenguaje de diseño de la marca; ni siquiera es su techo con ocho capas de lona que se activa de forma automática en 16 segundos y hasta una velocidad de 50 km/h lo que más sorprende.
Quizá sea lo que hay bajo el capó lo que realmente atrape a los amantes de la conducción deportiva. Se trata de un V8 biturbo de 4,0 litros (de origen Mercedes, por cierto), que entrega 510 CV y se asocia a una caja de cambios automática de ocho velocidades firmada por ZF. Con este propulsor, el descapotable británico es capaz de alcanzar los 300 km/h y de alcanzar los 100 km/h desde parado en 4,1 segundos.
La variante coupé ofrece también en la gama un V12 turbo de 5,2 litros y 608 CV que, por el momento, queda descartado en el DB11 Volante. Desconocemos el motivo, aunque lo que sí sabemos es que, de llegar a fabricarse, el peso del coche quedaría por encima de las dos toneladas debido al extra de 110 kilogramos que plantea el descapotable frente al coupé. Mucho para un modelo de estas características que aspira a ofrecer cierta deportividad.
Entre la dotación de serie, el nuevo Aston Martin DB11 Volante contará con asientos eléctricos tapizados en piel, un sistema de cámaras con visión 360 grados, pantalla de 8 pulgadas en la consola central o faros de LED. Nada especialmente novedoso y nada que no tengan muchos modelos menos lujosos, pero ¿a quién le importa cuando lo que tiene entre manos es lo último de una de una de las firmas más veneradas de todos los tiempos?
El agente 007 tuvo ocasión de probar el Aston Martin DB10, un prototipo que no fue más allá de las pantallas y que sirvió de base para definir el DB11. No dudamos que al mismísimo Bond le encantaría guardar en su garaje un Aston Martin DB11 Volante como el que ilustra esta noticia. Sobre sus precios, aún no se han revelado cifras oficiales, pero será algo más caro que el coupé con motor V8, que parte de 209.989 euros.