Ya está todo a punto en la sede central de Colonia, en Alemania, para la fabricación del nuevo motor que Aston Martin ha desarrollado para el DB11. Quien conozca los coches de la firma británica sabrá que gran parte de su espectacularidad se la debe a sus propulsores. Prestaciones, carácter y sonido se esconden bajo el capó de los Aston Martin de cualquier época.
El Aston Martin DB11 estrenará una mecánica 5.2 Twin Turbo de 12 cilindros en V, que recurre a la sobrealimentación en lugar de la aspiración natural de los motores de antaño. Es un diseño propio, totalmente nuevo, cuyo resultado son unas cifras de potencia y par sumamente atractivas. Con 608 CV y 700 Nm se convierte en el propulsor de fabricación en serie más potente de la marca hasta la fecha. Pero no sólo eso, también es el que logra mejores prestaciones, como demuestran los 3,9 segundos que necesita para alcanzar los 100 km/h desde parado o los 320 km/h de velocidad punta.
Este V12, además de prometer mucha rabia en las aceleraciones, es más eficiente. La marca no ha revelado cuál es la diferencia de consumo frente a los motores anteriores, pero lo que sí sabemos es que cuenta con un sistema de desactivación de cilindros -al estilo del cylinder on demand (CoD) del grupo VW- y con un dispositivo de parada y arranque Start/Stop. Queda claro que ni siquiera los modelos más prestacionales escapan a la reducción del gasto de carburante y emisiones nocivas.
Un motor por persona
La sede de Colonia, que responde a las siglas AMEP, comenzó su actividad en 2004 como una planta de fabricación exclusiva de motores. Más de 100 trabajadores altamente cualificados trabajan en un espacio de 12.500 metros cuadrados que se dividen en cuatro áreas diferenciadas: en una se ensamblan los bloques, en otra las culatas; la tercera es para el ensamblaje de piezas que requieren una atención más artesanal, mientras la cuarta se enfoca a la recepción de piezas y envío de los motores ya completos.
Cada motor lo produce una sola persona, que se encarga de controlar el proceso completo, de principio a fin, durante las ocho horas que dura. La fábrica tiene una capacidad de producción de 8.000 unidades anuales, entre las que figura el nuevo 5.2 Twin Turbo pero también los 6.0 V12 y 4.7 V8, que seguirán dando vida a otros modelos de la gama Aston Martin.
Andy palmer, CEO de la marca, ha dicho que esta fábrica "es una de las joyas de la corona de Aston Martin. Tener la capacidad de diseñar y producir el nuevo motor V12 de altas prestaciones es algo muy especial que, sin duda, marca el comienzo de una etapa de grandes éxitos".
