
El proyecto se llama AM-RB 001 y su objetivo es superar a los Bugatti Chiron, LaFerrari, McLaren P1 o Porsche 918. El diseño será tan espectacular que romperá con todo lo anterior realizado por Aston Martin aunque sin perder la personalidad de la marca y el desarrollo técnico será supervisado por la escudería de F1 Red Bull Racing.
El plan de la firma británica es fabricar una serie limitada a 99 unidades, pero sin olvidar la competición ya que habrá también una versión especial para circuito. Y aunque nada ha trascendido todavía de la técnología utilizada en su motor central, todo apunta a que recurrirá a la hibridación para conseguir la potencia y eficiencia que se esperan de un superbólido del año 2020.