La Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA) pide a los gobiernos nacionales que la nueva prueba (WLTP) de homologación de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos traiga consigo una fiscalidad justa y no suponga un aumento de los impuestos para los usuarios.
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
En un comunicado, el secretario general de la asociación, Erik Jonnaert, recalcó que en caso de que los ejecutivos no actúen, esta nueva medida, que comenzará a implantarse a partir del 1 septiembre, podría aumentar la carga impositiva sobre los consumidores.
Además, destacó que no todos los países de la Unión Europea (UE) están preparados para su introducción, ya que si "simplemente" extrapolan los valores del actual sistema de medición de emisiones (NEDC) al nuevo, los vehículos nuevos tendrían una tasa impositiva más alta. En la actualidad, hasta 19 Estados miembro de la UE aplican la prueba de evaluación en laboratorio.
Jonnaert advirtió también que el nuevo sistema generará un valor de emisiones más alto en las mismas condiciones y consumo en comparación el anterior ciclo de homologación, consecuencia de que el examen será más riguroso.
Relacionados
- Economía/Motor.- El automóvil emplea a 12,6 millones de personas en la Unión Europea
- Economía/Motor.- El superávit comercial del automóvil baja un 5,4% hasta mayo, aunque supera los 3.000 millones
- Economía/Motor.- El superávit comercial del automóvil baja un 5,4% hasta mayo, aunque supera los 3.000 millones
- Economía/Motor.- Faconauto pide colaboración entre sector y Gobierno para que el automóvil siga siendo estratégico
- Economía/Motor.- La industria del automóvil lanza 20 medidas para crear 80.000 empleos hasta 2020