
La Dirección General de Tráfico (DGT) baraja la posibilidad de fijar un número mínimo de clases prácticas antes de examinarse por primera vez para obtener el carné de conducir. La razón es que según las estadísticas que maneja el organismo, el 73% de los que se examinan suspenden al primer intento.
"Dentro de la reforma que tenemos que hacer de la Ley de Tráfico tendremos que reflexionar sobre la conveniencia de introducir cambios en la formación del permiso de conducir que eviten que el 73% suspenda en primera instancia", declaró Serrano a los medios tras su comparecencia en la Comisión de Seguridad Vial y Movilidad sostenible del Congreso.
Una de las soluciones que ha planteado a este porcentaje de suspensos es establecer un número mínimo de clases, tanto teóricas como prácticas, para que no sea el alumno quien decida cuándo presentarse, como ocurre actualmente.
"Ahora mismo el alumno es libre de presentarse a ver si aprueba", detalló Serrano, quien señaló que esta situación también está provocando "saturación" y "tapón" en algunas jefaturas mientras que los examinados no están "lo suficientemente preparados para presentarse". "Falta formación", agregó el director de la DGT.
Del mismo modo, concluyó aseverando que un cambio en el sistema de formación también supondría "llegar a un número de aprobados en primera convocatoria similar al resto de Europa".