La Comisión Europea ha anunciado este miércoles una multa de 155 millones de euros a seis fabricantes de componentes para vehículos por coordinar precios e intercambiar información sensible en el mercado provisión de sistemas de control de climatización y de refrigeración de motores.
En concreto, el Ejecutivo comunitario ha multado a las empresas japonesas, Calsonic, Denso y Sanden y Panasonic, a la alemana Behr y a la francesa Valeo por la existencia de cuatro cárteles diferentes entre estas compañías.
No obstante, Panasonic ha eludido una multa que habría ascendido a 200.000 euros por informar sobre la existencia de uno de los cárteles, el único en el que participaba. De la misma forma, Denso ha visto reducida su carga por haber revelado a Bruselas la existencia de tres pactos y ha evitado una sanción que hubiera ascendido a 287 millones.
Además, Behr, Calsonic, Denso, Sanden y Valeo se han beneficiado de reducciones por cooperar con la investigación y Bruselas ha aplicado una disminución del 10% a todas las multas por haber reconocido los fabricantes su participación en los pactos de precios.
Asi, el Ejecutivo comunitario ha impuesto una multa final de 65,1 millones de euros a Behr, de 26,8 millones de euros a Valeo, 64,6 millones de euros a Sanden, 322.000 euros a Denso y de 1,75 millones de euros a Calsonic.
¿Cómo operaban?
Las empresas sancionadas coordinaban precios o mercados, e intercambiaban "información sensible" para proveer componentes de climatización y de refrigeradores de motores a compañías como Audi, BMW, Suzuki, Mercedes, Renault, Volvo y Nissan.
Esa coordinación, que finalizó en 2009, se produjo en reuniones trilaterales en Europa en el caso de uno de los cárteles, y mediante encuentros bilaterales, correos electrónicos y llamadas en Japón y el Viejo Continente en los demás supuestos.
"La decisión de hoy subraya que no aceptamos cárteles que afectan al mercado europeo, allá dónde se encuentren y cómo sea que estén organizados", declaró la comisaria de Competencia Margrethe Vestager, quien durante una rueda de prensa recalcó que los cárteles también han actuado en Asia y que las autoridades japonesas están investigando los casos. Igualmente, la política danesa reveló que Bruselas colaboró con las autoridades estadounidenses en las indagaciones.