Clicars es una start-up española que nace bajo la idea de lograr que el proceso de compra y venta de vehículos de segunda mano sea "mucho más digital y transparente que hasta ahora". Esta idea, que ya se aplica en EEUU se quiere implantar en nuestro país para transformar un proceso tradicionalmente complejo y de gran desconfianza en algo más sencillo y seguro.
Los fundadores de la empresa son Pablo Fernández y Carlos Rivera, dos ex directivos relativos a la banca y el mundo del automóvil que, tras comprobar en varios países que la compraventa de coches usados era más transparente y menos compleja que en España, decidieron lanzarse a la aventura de facilitar las cosas a los compradores de nuestro territorio.
Según ellos mismos comentan, Clicars está especializada en coches bastante nuevos, es decir, con pocos años y pocos kilómetros a sus espaldas, sin accidentes graves y con un historial de mantenimiento completo y al día. Aseguran, también, que el modelo digital que han implantado "permite a sus clientes vender su vehículo por más y comprar por menos".
Devolución de coches
Para vender un coche el cliente no tiene que moverse de casa: tras una tasación preliminar gratuita, un certificador de la empresa acude donde haga falta para revisar el coche. Una vez comprobado que el coche está en buenas condiciones, Clicars realiza el pago en el acto y se encarga de todo el papeleo.
A la hora de comprar, Clicars ofrece una selección que ha superado un proceso de calidad en el que se verifican hasta 230 puntos de control. Estos coches cuentan con año de garantía y un compromiso de devolución en siete días o 1.000 kilómetros. Además, el cliente puede probar el coche antes de comprarlo, o recibirlo en su domicilio si lo desea.
Entre los objetivos fundamentales, apunta Carlos Rivera, se encuentra el de "eliminar los sobrecostes y la desconfianza al tratar con algunos profesionales, así como la incertidumbre y la incomodidad al hacerlo con particulares".