
El sector automovilístico alemán se ha mostrado claramente a favor del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea (UE) y EEUU, que se negocia desde julio de 2013.
El presidente de la Asociación Alemana de la Industria Automotriz (VDA), Matthias Wissmann, ha asegurado en Berlín que "el Tratado de Libre Comercio (TTIP como se conoce por sus siglas en inglés) ofrece a Alemania y a Europa grandes oportunidades: un mercado transatlántico sin fronteras, sin aduanas a cambio de estándares comunes e inversiones seguras".
El sector automotriz alemán considera que este Tratado aportará a ambas partes más bienestar y empleos. "Queremos sentar un precedente también para nuestros empleados con nuestro sí al Tratado", afirma Wissmann.
Sin embargo, los comités de empresas de los principales fabricantes automovilísticos de Alemania y el sindicato IG Metall advierten de que la ventajas económicas que aporte el Tratado pueden producirse mediante recortes en los empleados y en los estándares medioambientales.
EEUU es el mercado exportador más importante para los fabricantes automovilísticos alemanes, en términos absolutos de exportaciones. La desaparición de los aranceles podría contribuir a un ahorro para las empresas de, como mínimo, 1.000 millones de euros.
Varios presidentes de compañías automovilísticas alemanas se han mostrado a favor del Tratado de Libre Comercio entre la UE y EEUU, entre ellos el de Daimler, Dieter Zetsche, y el de BMW, Norbert Reithofer.
Zetsche explica que el año pasado las empresas alemanas exportaron un 14% de los turismos a EEUU, por valor de 20.000 millones de euros. "Sin embargo, tenemos que hacer frente a numerosas barreras comerciales", según Zetsche.
Reithofer, por su parte, considera que las factorías en Norteamérica se beneficiarían también del Tratado de Libre Comercio entre las dos regiones.