Fernando Alonso (Ferrari) encara el Gran Premio de Mónaco con la esperanza de remontar en la clasificación del Mundial, con la principal baza de los neumáticos blandos, que muestran un mejor rendimiento que los duros en el F150º.
Tras la decepcionante actuación de Ferrari en el GP de España, en la escudería italiana son conscientes de que no pueden descuidar ningún detalle, pues cualquier error podría significar el adiós definitivo al Mundial en favor de los pilotos de cabeza.
Por ello, Alonso y su equipo esperan que Mónaco sea el punto de inflexión que les aúpe de nuevo a la lucha con Red Bull y McLaren. A la espera de como rinda el monoplaza rojo en el circuito urbano de Montecarlo, la gran esperanza de Ferrari se sostiene en el uso de los neumáticos blandos que Pirelli va a llevar a Montecarlo y que, a juzgar por el pésimo rendimiento obtenido por Ferrari con el compuesto duro en Montmeló, parecen funcionar mejor en el F150º.
Además, tras los cambios implementados en su staff esta semana, en Ferrari esperan obtener mejores resultados en el comportamiento del monoplaza durante el GP de Mónaco y ampliar así sus opciones de luchar por el título.
La clave para realizar una buena carrera el domingo será, probablemente, hacer la mejor calificación posible debido a la notable dificultad para adelantar en carrera que siempre ha caracterizado al mítico circuito.
Revolución en Ferrari
