
En el Día Mundial de los Refugiados, ProFuturo y Education Cannot Wait (ECW) anuncian una alianza estratégica para mejorar el acceso a una educación de calidad a niños y niñas en zonas de conflicto y crisis, a través de la educación digital y la formación docente.
Ambas organizaciones se comprometen así a colaborar en aquellos países donde la intervención pueda beneficiar a niños refugiados y desplazados internos, trabajando en alianza con ministerios de educación y otras organizaciones internacionales y nacionales para garantizar la efectividad y la sostenibilidad del programa ProFuturo.
"La alianza con Education Cannot Wait permitirá a ProFuturo ampliar el alcance de su trabajo y adaptar su innovador programa educativo para atender las necesidades de niños en zonas de conflicto y crisis", indicó la directora general de ProFuturo Sofía Fernández de Mesa. "Ningún niño debería ser privado de una educación de calidad, independientemente de la situación por la que esté pasando. La educación es su ventana a un futuro mejor", añadió.
ProFuturo está participando en la definición del Multi-Year Resilience Programme (MYRP) que Education Cannot Wait está desarrollando en Etiopía en colaboración con UNICEF, ACNUR, Save the Children, Plan International, otras organizaciones y donantes internacionales, y sociedad civil nacional. El programa de tres años aborda las necesidades de niños refugiados no escolarizados y de aquellos privados de educación debido al desplazamiento interno de poblaciones motivado por problemas de seguridad o por las consecuencias del cambio climático. ProFuturo está integrando al programa el componente de educación digital para complementar los enfoques de aprendizaje más tradicionales.
"Education Cannot Wait celebra esta alianza pionera con ProFuturo. Para los niños y niñas en situaciones de crisis, como refugiados y desplazados internos, la tecnología puede ser un poderoso facilitador para el aprendizaje", señaló su directora de Yasmine Sherif. "Trabajando juntos, aprovechamos las fortalezas y experiencia de cada organización para conseguir resultados de mayor impacto para estos niños y jóvenes", concluyó.
ProFuturo ha adaptado su programa de educación digital a contextos de refugiados con un enfoque integral alineado con los principios de la Red Internacional de Educación en Emergencias (INEE). Esto con el objetivo de garantizar, tanto en contextos de educación formal e informal, tres pilares fundamentales: el acceso a la educación, la calidad educativa y la resiliencia de los niños y niñas refugiados.
Esta adaptación parte de la experiencia del proyecto piloto que ProFuturo está llevando a cabo en el Líbano y que ha mostrado que, además de herramientas educativas de calidad, los niños y niñas necesitan tener asegurados un apoyo psicosocial, una mejor alimentación y un espacio de aprendizaje con una infraestructura adecuada, siempre involucrando a las familias y a las comunidades. A lo largo de 2019 y 2020 ProFuturo prevé llevar este modelo de intervención educativa en contextos de refugio a Malawi, Jordania, Etiopía, Uganda y Colombia.
La educación en situaciones de emergencia: cifras clave
- Naciones Unidas estima que 70 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a huir de sus hogares. Más de la mitad, casi 25,4 millones, son menores de 18 años.
- En más del 90% de los casos estos movimientos forzados de personas se dan en países en desarrollo, cuyos sistemas educativos no tienen la capacidad de incorporar a los niños y jóvenes refugiados que deberían estar en la escuela.
- Más de la mitad de los niños refugiados del mundo, 4 millones, no están escolarizados.
- Las niñas refugiadas tienen menos posibilidades de estar escolarizadas que los niños.
- Sólo el 61% de niños refugiados tiene acceso a la educación primaria, comparado con el 90% a nivel mundial.