
El Consejo de la Juventud de España (CJE) denuncia que en España el derecho a la educación no se cumple para los estudiantes de familias con rentas más bajas y denuncia que Real Decreto en materia de becas que ha presentado el Ministerio de Educación y Formación Profesional no supone la reforma profunda y ambiciosa que el sistema de becas y ayudas al estudio necesita para ser una herramienta que garantice la igualdad de oportunidades.
Tal y como indica nuestro responsable de Educación Formal, Miguel Vargas, "con el sistema de becas no se cumple con las necesidades de aquellos estudiantes con rentas bajas ya que sólo consigue acceder a éstas un 25% del alumnado en educación no universitaria". Asimismo, también es importante destacar que con las becas actuales tampoco se evita que aquellas personas jóvenes que necesitan apoyar económicamente a su familia abandonen prematuramente el sistema educativo, ya que la cuantía media por becario no universitario del umbral más bajo de renta son 2.041,46 euros, lo que no cubre el coste de oportunidad de no estar trabajando, ni la necesidad de movilidad.
Además, esta desigualdad es mayor si hablamos de personas inmigrantes, ya que es un colectivo con mayor riesgo de pobreza y también infrarrepresentado en la recepción de becas: solo 1 de cada 10 hogares de nacionalidad de fuera de la UE reciben becas, frente a 1 de cada 3 en hogares nativos, cuando los primeros superan su riesgo de pobreza (55,4% frente a 21%) y abandono escolar (35,8% frente a 15,9%) a los segundos, según los datos del informe "Becas para que nadie se quede atrás" elaborado por Save The Children.
Ante esta realidad, desde el CJE volvemos a reclamar al Ministerio de Educación que se tengan en cuenta nuestras demandas para cumplir con las observaciones del Comité de Derechos del Niño de la ONU para España, que expresan que los costes indirectos de la enseñanza obligatoria como los libros de texto o el transporte dificultan el acceso a la Educación de los colectivos con mayor riesgo de exclusión. Así, una verdadera reforma del sistema podría suponer, según expone Vargas, "un gran avance hacia una mayor igualdad de oportunidades, ya que la Educación pública y universal debe ser un valor prioritario en cualquier democracia consolidada".
En este sentido las propuestas que se hacen desde le CJE son:
- Aumento progresivo de la financiación en becas y ayudas al estudio hasta la media europea, priorizando la inversión en la educación no universitaria.
- Paso de un sistema de cuantías variables a uno de cuantías fijas.
- Rebajar los requisitos académicos de acceso y mantenimiento de la beca.
- Aumento significativo de las becas compensatorias y de movilidad para bachillerato y FP y equipararlas con las universitarias.
- Crear modalidades específicas para quienes están en riesgo de abandono escolar en la ESO, para quienes compatibilizan estudios y trabajo y para quienes quieren volver al sistema educativo.
- Revisión de los umbrales de renta para que cubran a todas las familias en situación de pobreza y añadir una deducción para familias monomarentales.
- Modificación de requisitos y plazos para que las becas estén ingresadas al principio del curso y las familias no tengan que adelantar los gastos.
- Acciones informativas y de apoyo a la solicitud de beca.
- Establecer el derecho subjetivo a las ayudas en educación obligatoria que garantice que se cubre a todos los niños y niñas en situación de pobreza los libros, el comedor y el transporte escolar, vivan donde vivan.
- Gratuidad de libros de texto y material escolar mediante préstamo.
- Creación del Observatorio de Equidad Educativa como órgano para analizar las becas y ayudas como parte de las políticas de equidad.