Ecoaula

¿Están las universidades españolas preparadas para afrontar los retos del siglo XXI?

En el informe "Transformación y Futuro de la Universidad Pública en España", que KPMG ha hecho público recientemente, se refleja el estado de nuestras universidades; este análisis cualitativo se ha llevado a cabo gracias a las opiniones y expectativas de varios representantes de las instituciones más importantes de España en enseñanza pública superior, como pueden ser María Luz Martín o Josep Antoni Plana, entre otros

Según los datos que ofrecen, el porcentaje de estudiantes de la población joven entre 18 y 24 años es el mayor de la historia situándose por encima del 31 por ciento. Sin embargo, el número de estudiantes universitarios ha descendido en los últimos años, siendo las causas demográficas una de las principales razones. Aun así, también se refleja cómo el acceso a la universidad es cada vez mayor por parte de nuestros jóvenes. No obstante, cabe plantearse la siguiente duda: ¿ha mejorado su formación?

La sociedad actual vive inmersa en un proceso constante de transformación digital y la formación superior debe hacerse cargo del mismo. Aun así, a pesar del esfuerzo de inversión que se ha hecho en los últimos años para incorporar las nuevas tecnologías como refuerzo a la labor docente, ¿ha supuesto esto un cambio en las aulas universitarias?

El llamado e-learning, proceso de enseñanza-aprendizaje a través de la red, gana terreno en las universidades privadas y proliferan los grados y máster online (debido a su mayor flexibilidad y comodidad); sin embargo, existen reticencias entre las universidades públicas, donde se mantienen férreos en la defensa de la enseñanza presencial. ¿A qué se debe esta defensa?, ¿está el nivel de competencia digital docente a la altura de las circunstancias? La Generación Z invade las aulas y todavía se encuentra la misma estructura que las generaciones pasadas, aumentando así la desmotivación por los estudios y el descrédito de la institución bajo una sociedad que demanda nuevas habilidades y conocimientos digitales.

La necesidad de renovación en la práctica docente se hace patente, aun así, "en 2016 habían recibido formación en competencias en Tecnología de la Información una media del 25 por ciento del Personal Docente e Investigador (PDI), prácticamente la misma cifra que el año anterior".

Si hablamos de la formación docente en competencia digital debemos preguntarnos también si la institución en sí misma apuesta por la señal digital. Para ello, referenciamos la cita de Javier Sevillano, vicerrector de Asuntos Económicos de la Universidad Complutense de Madrid: "la universidad debe adaptarse a la digitalización de la enseñanza, pero también a la gestión." Así, cuestionamos la capacidad de adaptación a la era tecnológica de las universidades públicas, a su apuesta por la identidad digital como base para la comunicación y la interoperabilidad entre docentes y estudiantes. Las universidades españolas se encuentran aún frente a un muro de estructuras rígidas que se hacen resistentes al cambio, tal vez influidas por la escasez de nuevos docentes jóvenes que ofrezcan aires nuevos.

De este modo, nos hacemos eco de los retos a los que se enfrenta la universidad al igual que el resto del mundo educativo. La apertura digital de las universidades es vital en un mundo interconectado, crear sinergias en la red es esencial para fomentar la divulgación de conocimientos y su proyección hacia el exterior. De las facultades de hoy en día saldrán los docentes del mañana, docentes que necesitan afrontar los desafíos de las nuevas generaciones con habilidades propias de este siglo.

comentariosicon-menu0WhatsAppWhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinlinkedin
arrow-comments