El sector educativo se encuentra inmerso en una profunda transformación tecnológica. Desde marzo del año 2020 nada volvió a ser igual. Un antes y un después se adentró en nuestras vidas y la enseñanza supo adaptarse a una velocidad vertiginosa. Las clases en línea y la educación híbrida se integraron en el día a día de las familias, haciendo de la tecnología una herramienta crucial para el proceso formativo de los distintos alumnos.
Una versión virtual de la realidad en la que podemos desarrollar nuestra vida digital a través de un avatar. Combinado con otros recursos que permitan trabajar con realidad virtual o aumentada, el metaverso está rompiendo todos nuestros esquemas desde que Mark Zuckerberg presentara la nueva marca de Facebook "Meta", en el último trimestre de 2021.
"El metaverso puede ser una gran herramienta para que los alumnos y profesores disfruten de un aprendizaje mucho más inmersivo"
"El metaverso puede ser una gran herramienta para que los alumnos y profesores disfruten de un aprendizaje mucho más inmersivo", explica Silvia Fernández, Content Manager de Classlife. Además, destaca que para modelos híbridos o formaciones online "facilitará la creación de una comunidad ya que, con el metaverso, un centro educativo puede crear un campus o una réplica de su institución en versión virtual".
También, las instituciones que apuesten por "este nuevo mundo" podrán ofrecer "una experiencia 360 a alumnos y trabajadores" y, por supuesto, "dispondrán de mucha más flexibilidad y adaptabilidad ante imprevistos", gracias a este mundo digital. Eso sí, Fernández insiste en que "debemos ser conscientes de que no será un cambio de hoy para mañana", especialmente "si pensamos en el espectacular metaverso que nos dibuja Zuckerbeg". Si reflexionamos sobre el uso más amplio del metaverso, combinado con la realidad virtual y aumentada, una cosa está clara: la combinación de todos estos elementos en el ámbito educativo permitiría enseñar y aprender como nunca antes. Fernández señala que se podrá llevar la gamificación de las lecciones a otro nivel; "será posible viajar sin moverse para descubrir la historia y la cultura de otros lugares y los estudiantes podrán aprender de ciencia como jamás han imaginado".
En definitiva, hará de las lecciones algo mucho más memorable y transformará el día a día de los alumnos y los profesores.
Enseñanza personalizada
A este respecto, son muchos los expertos que afirman que, con la digitalización y el aprendizaje híbrido, el modelo educativo avanzará hacia una enseñanza más personalizada. El alumno, destaca Fernández, "pasará a ser más responsable de su propio aprendizaje y el docente adoptará un papel más similar al de un guía". Evidentemente, destacan los expertos, "los profesores y los conocimientos que imparten seguirán siendo imprescindibles, pero su rol será algo distinto".
"El alumno pasará a ser más responsable de su propio aprendizaje y el docente adoptará un papel más similar al de un guía"
"Los nuevos escenarios virtuales que anticipa el metaverso también presentan grandes oportunidades para el desarrollo de conocimientos, creatividad e innovación", apunta Roberto Milán, director comercial de la tecnológica Nunsys. Entre otras, "'soft skills' y competencias, que definirán a los profesionales del futuro".
En esta línea, la transformación digital permitirá al sector educativo generar nuevas experiencias innovadoras y flexibles (realidad virtual, inteligencia artificial, gemelos digitales). Con todo, el aprendizaje de muchas de estas habilidades implica un cambio cultural que se aceleró durante la pandemia, y en el que "será importante abordar, analizar y entender tecnologías aplicadas a la industria 4.0", detalla Millán, tales como la inteligencia artificial, big data o blockchain.
La realidad virtual romperá así barreras formativas gracias a un aprendizaje inmersivo como nunca antes se había visto. Por ejemplo, ya estamos viendo como el uso de gemelos digitales en la educación permite a los alumnos observar modelos virtuales de procesos, estructuras, productos y servicios del mundo real para analizarlos, simular, planificar y evitar problemas antes de que se produzcan. En consecuencia, surgirán nuevos perfiles profesionales importantes en el sector tecnológico y la digitalización de administraciones y empresas. Es el caso del profesional GIS (Geographical Information System), "uno de los perfiles más demandados para la agregación, visualización y el análisis de los datos", explica Paloma Lara, Directora de Tecnología, Innovación y Formación en Esri España.
Transformación
Otro aspecto a tener en cuenta con la transformación digital es la modificación del papel de los profesores, que pasan a tener múltiples roles. La enseñanza híbrida, destaca Fernández, "y si nos atrevemos, el metaverso también", "hacen que los docentes tengan que sumar habilidades a las que ya tenían". Deben asumir también el papel de "facilitadores, tener conocimientos de tecnología educativa y con las nuevas formas de comunicarse de los alumnos", y por supuesto, "deben tener la habilidad de coordinar el aprendizaje híbrido sin dejar a un lado la educación socioemocional", detalla.
En esta profunda transformación, la digitalización es una realidad en casi todos los aspectos de nuestra vida: en casa, en el trabajo, en nuestra manera de relacionarlos ... ¿Puede la educación obviar esta realidad y quedarse atrasada? La respuesta, según los técnicos es que "ni puede ni debe". Según la experta en Content Manager de Classlife esta transformación debe resolver tres retos principales: "actualizar un sistema educativo obsoleto; preparar a los alumnos para la realidad y su futuro profesional; y mejorar el funcionamiento de los centros educativos mediante el uso de herramientas digitales".
"La enseñanza debe actualizarse para adaptarse a esta realidad y, a su vez, ofrecer a los alumnos los recursos necesarios para vivirla de forma segura y sana"
Este cambio en las técnicas de aprendizaje viene dado, en gran parte, por un cambio cultural, y no solo por la existencia de las nuevas tecnologías. Es evidente que los niños y jóvenes consumen cultura y entretenimiento de forma totalmente distinta a como se hacía hace unos años. Por ello, "la enseñanza debe actualizarse para adaptarse a esta realidad y, a su vez, ofrecer a los alumnos los recursos necesarios para vivirla de forma segura y sana".
De todos modos, no es la tecnología en sí misma, si no el uso que hagamos de ella. No se trata, como explican los expertos del sector, "de tener muchas herramientas digitales o las últimas tecnologías, sino de lo que hacemos con ellas". "Se trata de entender que disponemos de estos recursos en educación y plantear y planificar la enseñanza con esto en mente". Solamente así se podrá hacer "una transformación digital real, en la que la tecnología se integra como un elemento más en el proceso de aprendizaje".
Brecha digital
Pero, ¿qué va a ocurrir con la brecha digital en nuestro país? Aunque aún sigue presentándose como un hándicap en algunas zonas rurales, en 2021 más del 87% de hogares españoles disponían ya de conexión a internet, de acuerdo con datos de Statista. Además, el año pasado se puso en marcha el Programa para la Digitalización del Ecosistema Educativo, que busca facilitar a los centros educativos públicos el acceso a recursos digitales, proporcionando también la formación pertinente al profesorado para su uso en las aulas.
No obstante, ¿están los distintos actores (alumnos, centros, profesorado y familias) preparados para una educación digital 3.0? Los expertos consideran que "sí". Evidentemente, señalan "es necesario que se destine presupuesto público a mejorar la situación de ciertas zonas rurales, pero estamos convencidos de que todos los actores implicados están preparados para la educación 3.0, especialmente los alumnos".
Es un hecho que se evidenció durante la pandemia. Los expertos apuntan a que "si todo el mundo supo estar a la altura y adaptarse para continuar con las clases" de forma precipitada y sin todos los recursos durante la Covid-19, "¿Cómo no vamos a lograrlo una vez superada la pandemia y con los recursos necesarios?"
Sin embargo, la escasez de talento digital en la enseñanza española sigue siendo un reto estratégico difícil de abarcar, como explican desde Classlife: "Es evidente que los requisitos de los empleos de mañana sean distintos a los de hoy y no tienen nada que ver con lo que se necesitaba hace unos años".
Si en este momento existe escasez de talento se debe a dos razones principales; la primera, señala Fernández, "es la velocidad a la que ha evolucionado la tecnología en los últimos años". Han aparecido puestos de trabajo que no existían hace 5 o 10 años, como son los expertos en criptomonedas; las empresas gigantescas como TikTok, de donde han surgido especialistas en comercialización de productos; ingenieros y técnicos especializados en conducción autónoma; técnicos en drones; analistas de big data; expertos sanitarios en teleasistencia; especialistas en posicionamiento web, desarrolladores de apps o construcciones con modelado 3D, entre muchas otras profesiones. El segundo motivo, según declaraciones de Fernández, "es la falta de enseñanza superior orientada al mercado laboral", "una enseñanza dinámica y cambiante que pueda adaptarse a los cambios que sufre la sociedad", en una transformación constante que se acelera "año tras año", señala.
A este respecto, expertos de isEazy, dedicados a la formación empresarial señalan que, desde su experiencia "la escasez de talento digital y la formación están intrínsecamente ligadas". Y el problema de esa escasez, afirman "viene dada por el enfoque que se le está dando a la formación corporativa en las organizaciones".
El reto es "dirigirnos hacia la creación de una formación que permita personalizar la formación y entender de forma individual las necesidades de cada profesional"
Actualmente la mayoría de las estrategias de formación, inciden "incluyen contenidos generales para todos sus empleados, sin tener en cuenta su 'expertise'". Sin embargo, capacitar a un empleado realmente requiere un enfoque "mucho más detallado de las competencias que necesita en función de su puesto de trabajo". Un ingeniero, por ejemplo, "no necesita aprender las mismas habilidades digitales que un 'manager'", pues sus puestos requieren un grado de personalización en su formación diferente "y no todas las empresas están enfocando el aprendizaje desde esa perspectiva", explican.
El reto es precisamente ese, "dirigirnos hacia la creación de una formación que permita personalizar la formación y entender de forma individual las necesidades de cada profesional", detallan desde isEazy.
Profesorado
Desde Classlife apuntan a la formación del profesorado y profesional educativo para que España remonte posiciones de Europa, pues nuestro país, pese a los distintos avances en inversión tecnológica, se sitúa entre los países donde menos se fomenta y se usan las tecnologías y dispositivos digitales en la enseñanza, según el último informe PISA publicado. Por ejemplo, en España, solo el 53,3% de los escolares considera suficiente el número de dispositivos digitales conectados a internet que se utiliza en las escuelas, mientras que la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es del 67,2%.
Cabe destacar que, según el informe solo el 11,5% de los profesores son incentivados para integrar dispositivos digitales en la enseñanza, con una diferencia de más de 40 puntos con la media de la OCDE (56,7%), siendo España el país con peor puntuación, tanto de los países que integran la OCDE como de los países asociados.
En este sentido, existe una gran distancia con respecto a países como Islandia, Lituania, Polonia, Holanda o Turquía, con porcentajes superiores al 90%.
No obstante, el informe también señala que solo el 33,1% de los docentes cuenta con el tiempo suficiente para preparar sus clases integrando estas tecnologías, muy por debajo de la media de la OCDE, que se sitúa en un 60,9%. En este contexto, y como afirman desde Classlife, "tanto el talento como los recursos existen, pero hay que apostar por ello y aprender de quien puede enseñar". Fernández, incide en que "muchos profesores y otros profesionales del sector educativo necesitarán formación para conseguir tener el conocimiento necesario a la hora de utilizar ciertas herramientas digitales, pero son perfectamente capaces de lograrlo".
España es un país de talento que carece de especialización, y es ahí donde reside su hándicap. Desde la inteligencia artificial, pasando por los lagos de datos o los gemelos digitales, el potencial de las tecnologías emergentes es asombroso. Pero solo se podrán adaptar estas tecnologías a las necesidades específicas de empresas y administraciones con profesionales cualificados que tengan conocimiento y capacidad para trabajar con ella.
Retos formativos
Acercar las necesidades del mercado al talento "es sin duda el primer paso a adoptar por parte del sistema educativo", pero también por parte de las empresas, "que deben liderar el cambio", como destaca Roberto Milán, director comercial de Nunsys.
Otro de los retos principales que esta transformación tecnológica conlleva es hacer un cambio de "mindset" (mentalidad social) por parte de las organizaciones para adaptarse a los cambios que esta nueva era exige. Así como adquirir el conocimiento y las competencias entre profesionales y organizaciones, donde el 'upskilling' (enseñar a un trabajador nuevas competencias) y el 'reskilling' (reciclaje profesional) son claves en todas las áreas de formación corporativa .