La Universidad de Alcalá es una de las más antiguas de Europa, cuyo origen se remonta a los Estudios Generales de 1293. Hoy en día esta institución cuenta con 28.000 alumnos y 2.000 profesores que se caracterizan por ofertar una docencia de calidad. José Vicente Saz, rector de la universidad desde el año 2018, explica cómo se encuentra esta institución en la actualidad.
¿Cómo se adaptó la universidad a la llegada de la pandemia?
La adaptación de nuestras estructuras y de nuestro trabajo a los nuevos parámetros impuestos por las necesidades sanitarias no ha sido en absoluto sencillo. Por una parte, hemos tenido que adoptar medidas preventivas y sanitarias complejas en todos los ámbitos de la universidad, medidas que han supuesto un esfuerzo añadido al ya habitual y que, inevitablemente, han dificultado el trabajo diario de todos los integrantes de la comunidad universitaria. Por otra parte, hemos tenido que poner todo nuestro esfuerzo, con un elevado grado de imaginación, en diseñar fórmulas novedosas que nos permitieran realizar el gran número de actividades que normalmente se llevan a cabo de forma presencial en un formato diferente. La utilización de la enseñanza online, la simulación y las diferentes fórmulas de digitalización han sido herramientas básicas para conseguir mantener nuestra actividad docente. También fue necesario adquirir nuevos equipos informáticos y dejarlos en préstamo para aquellas personas, tanto estudiantes como profesores, que no disponían de ellos. De la misma forma, y para que el personal de administración y servicios pudiera seguir realizando sus labores, fue necesario recurrir a fórmulas creativas que permitieran el trabajo a distancia.
En conjunto, creo que el trabajo ha sido ejemplar, que hemos sido capaces de adaptarnos y, como mencionaba, anteriormente, alcanzar de forma adecuada nuestros objetivos institucionales.
¿Qué objetivos se ha marcado para este curso escolar?
El principal reto para el este curso es, evidentemente, retomar nuestra actividad docente presencial al 100%, en definitiva, alcanzar la tan deseada normalidad. Como hemos podido ver a lo largo de estos últimos meses, con la evolución, a veces sorprendente, de la pandemia, no va a ser una tarea sencilla. Vamos a depender de la situación de la pandemia y, por supuesto, de las medidas que adopten nuestras autoridades sanitarias; no obstante, ya estamos trabajando para que aquello que dependa de nosotros, facilite en todo lo posible el retorno a la actividad docente presencial, así como la máxima normalidad en el resto de las labores que tiene que desarrollar nuestra universidad.
En cualquier caso, creo que en este momento existen motivos suficientes para ser optimistas.
¿Cuáles son los cambios más destacados que va a llevar a cabo este año?
Este nuevo curso académico en la UAH supondrá la reactivación del 'Plan Estratégico Universidad de Alcalá-2036', cuyo objetivo es mantener el liderazgo nacional e internacional en especial, en compromiso con la sociedad, medio ambiente, lengua española y digitalización.
Por otro lado, la mejora continua de la actividad docente en grados, másteres, doctorado y Estudios Propios es una de las primeras prioridades, para lo cual, la UAH cuenta con el nuevo Manual de Garantía de Calidad. Además, habrá una mejora de equipos para prácticas, se potenciarán las prácticas externas, las iniciativas de innovación docente y se trabajará en mejorar la empleabilidad de los egresados.
"Queremos fortalecer todas las actividades dirigidas a la internacionalización"
De la misma forma, vamos a incrementar nuestro esfuerzo para mejorar y potenciar nuestro programa propio de investigación, muy especialmente en todo lo que se refiere a la mejora de los equipos y a la retención y captación de talento.
También se encuentra entre nuestras principales prioridades para este curso, fortalecer todas las actividades dirigidas a la internacionalización, después de un año en el que se vieron reducidos drásticamente todos los procesos de movilidad. Y otro de los compromisos para este año va orientado a la promoción y estabilización del personal docente e investigador y el de administración y servicios.
La UAH se ha posicionado entre las mejores universidades según algunos rankings. ¿Qué importancia tiene para la institución estas clasificaciones?
En la UAH trabajamos para mantener nuestra presencia en los principales rankings internacionales y para incorporarnos a otros nuevos, de acuerdo con los intereses estratégicos de la universidad. Por lo general, nos sitúan entre las mejores universidades de España y del mundo. Sirvan como ejemplo, los excelentes resultados obtenidos en Times Higher Education World University Ranking, donde nos encontramos entre las 10 mejores universidades públicas de España, o en la edición del QS World University Rankings 2022, en la que la UAH ocupa la posición decimotercera, siendo la número 11 de entre las universidades públicas españolas.
Si nos fijamos en rankings de temática específica, el Impact Rankings nos posiciona entre las 100 mejores universidades del mundo en dos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el Ranking GreenMetric continúa situando a la UAH como una de las universidades más comprometidas con el medio ambiente, ocupando actualmente la segunda posición nacional y 24 del mundo.
¿Cuáles son las formaciones más destacadas de grados y posgrados en la universidad?
En este curso 2021-22, hemos puesto en marcha tres nuevas titulaciones de grado: el grado en Física e Instrumentación Espacial, que combina formación en ciencia y en tecnología, y los dobles grados en Informática y Administración y Dirección de Empresas (INFOADE) y en Ingeniería Electrónica y Automática Industrial e Ingeniería Electrónica de Comunicaciones. Y, por otro lado, la oferta de estudios de posgrado, tanto oficiales como propios, y de estudios de doctorado alcanza los cerca de 300 títulos.
La investigación ha cogido mucho peso en los últimos meses, ¿qué papel tiene en esta institución?
Es un momento especialmente oportuno para aplicar nuestra inteligencia corporativa, nuestra determinación y capacidad de innovación en favor del avance científico y social. En la Universidad de Alcalá contamos actualmente con más de 150 grupos que mantienen activas múltiples líneas de investigación. En nuestro caso, trabajamos día a día, para incentivar y mejorar la actividad investigadora: mantenemos y mejoramos, cada año, nuestro programa propio, promovemos y apoyamos la creación de nuevos grupos, planificamos la atracción y retención de talento, potenciamos la obtención de proyectos del mayor nivel científico a través de nuestra Oficina de Proyectos Europeos, estamos realizando un gran esfuerzo económico para mejorar la dotación de equipamiento científicos y hemos incrementado nuestro personal investigador, al tiempo que mantenemos nuestros esfuerzos para captar recursos externos.
"Nos encontramos entre las mejores 10 universidades según THE"
Confío en que poco a poco, nuestra sociedad sea más consciente de la importancia de la investigación y haga una verdadera apuesta por ella, lo que pasaría por mejorar la insuficiente financiación actual, reconociendo así su valor, importante y siempre necesario, pero, ahora, imprescindible en el futuro inmediato.
¿Cree que las universidades están adaptando la oferta formativa a la situación actual?
Las universidades estamos en un continuo proceso de adaptación, no podemos estar alejados de las necesidades formativas de la sociedad actual. Y no solo en competencias profesionales; debemos formar a nuestros estudiantes en aquellas otras competencias que les permitan desenvolverse en un mercado laboral en constante evolución y favorecer que esa formación se prolongue más allá, lo que denominamos formación a lo largo de la vida, ya que así lo demandan desde el punto de vista profesional y social y a cualquier edad.
Por otro lado, tras la experiencia de estos meses de pandemia, en los que hemos tenido que adaptar nuestra tradicional modalidad presencial de impartir la docencia, hemos de pensar en orientar nuestros modelos docentes para que sean cada vez más flexibles. Para ello resulta fundamental el uso de todas las tecnologías digitales.
¿Qué relación tiene la Universidad con el mundo empresarial?
La relación entre la universidad y la empresa es una de las bases de nuestro actual modelo de funcionamiento. Hoy día resulta fundamental para potenciar actividades de investigación, la transferencia de conocimiento, la mejora tecnológica de nuestros campus, potenciar la innovación… Es igualmente muy importante para la formación de nuestros estudiantes, con la creación de becas y ayudas financiadas por el sector empresarial o el desarrollo de convenios de prácticas que favorecen su inmersión en el mercado de trabajo al que tendrán que incorporarse una vez finalizados sus estudios. En definitiva, la relación universidad-empresa resulta, en estos momentos, un elemento indispensable para contribuir al desarrollo económico y social de nuestro país.
¿Cómo visualiza la institución en el futuro?
En esta compleja sociedad en la que vivimos, sometida a cambios cada vez más impredecibles, las universidades desempeñamos un papel esencial. En situaciones tan críticas como la que estamos viviendo, resulta especialmente necesario revisar los valores que, cada día, estamos obligados a transmitir a las nuevas generaciones. En este sentido, la educación es, sin ninguna duda, la pieza clave del crecimiento personal y colectivo y es fundamental potenciar la formación humanista que deben adquirir los estudiantes para convertirse no solo en excelentes profesionales, sino también en excelentes ciudadanos que trabajen para hacer de la nuestra una sociedad mejor.
En nuestro caso, tenemos muchos proyectos en marcha, algunos postergados por la pandemia, que espero podamos retomar en este curso, y otros que han surgido en estos meses. Son proyectos muy importantes y esperanzadores para la UAH, que van a permitir posicionarla en un primer plano nacional y, por qué no, también internacional, por ejemplo, en materia de investigación. En este sentido, y quiero destacar aquí el papel fundamental de toda nuestra comunidad universitaria, sé que trabajando todos juntos, con un horizonte común, vamos a ser capaces de alcanzar todos los logros que nos propongamos y superar cualquier reto que se nos presente, como ya hemos demostrado en los meses pasados, tan complejos.
En un futuro inmediato, la universidad deberá potenciar e incrementar su actividad investigadora, de innovación y de transferencia de conocimiento a la empresa y a la sociedad. Debe convertirse en uno de los motores y protagonistas de la actividad económica.
Por otra parte, debe adaptar su modelo formativo a una sociedad cambiante que evoluciona a una velocidad vertiginosa. Para ello tiene que ofrecer programas formativos que den respuesta a las necesidades sociales de cada momento y, que, además, lo haga de una forma rápida y flexible. Este modelo formativo tiene que incluir, no solo la adquisición de conocimientos y habilidades profesionales concretas, si no también competencias que permitan a sus egresados adaptarse con facilidad a un ámbito laboral cambiante y complejo, y que, además, les permita la "formación a lo largo de la vida", necesidad que ya se antoja imprescindible.