
La forma de aprender y de enseñar ha experimentado un cambio radical en los últimos tiempos, y la pandemia no ha hecho más que acelerar y catapultar el éxito de las formaciones a distancia. Especialmente de los infoproductos, cursos formativos con un contenido muy específico que se consumen online y son impartidos por expertos.
Según Hotmart, plataforma de distribución de infoproductos de habla hispana, desde que irrumpió el coronavirus, el número de personas que ha comprado un curso a través de Internet se ha incrementado en un 188% en nuestro país.
Un crecimiento espectacular que viene dado por las grandes ventajas que ofrecen este tipo de productos digitales tanto para los estudiantes como para sus creadores.
Está claro que para los alumnos, el hecho de poder estudiar online desde donde y cuando quieran ya es un punto a favor. Pero es que, además, en estos cursos ven una vía de escape a la enseñanza tradicional, que se está quedando obsoleta frente a nuevas profesiones y nuevas metodologías.
Los infoproductos, por tanto, son la alternativa que buscan para adquirir conocimientos prácticos sobre temas muy concretos que en la mayoría de los casos no están ni contemplados en estudios reglados. Y menos con la profundidad que ofrecen expertos y profesionales que destacan en su sector y aportan valor desde su experiencia real.
Todo esto hace que se dispare la demanda de este tipo de contenidos de pago y, en consecuencia, también la oferta. De hecho, cada vez son más los profesionales de diferentes ámbitos que ven en los infoproductos una oportunidad para crecer y diversificar sus vías de ingresos monetizando su conocimiento.
Además, al tratarse de un producto con unos costes fijos muy bajos en comparación a otro tipo de actividades, se convierten en un modelo de negocio altamente rentable al alcance de cualquier profesional cualificado que tenga alguna enseñanza que ofrecer.
Piensa que si el margen de beneficio de un negocio tradicional se sitúa en torno al 10 o el 20%, en el caso de los infoproductos esta cifra puede llegar a duplicarse. Y esto es, en gran parte, porque los costes de producción se reducen, básicamente, a la edición inicial.
Es decir, una vez creado el contenido del curso, los gastos fijos se limitan al mantenimiento de la plataforma o web donde se aloje y al lanzamiento de campañas de publicidad online para llegar a tus potenciales clientes. Pues, evidentemente, nada se vende por arte de magia y sería un error creer que el beneficio es totalmente neto a partir de la primera edición.
Sin embargo, con un infoproducto que realmente resuelva una necesidad y una mínima inversión, se pueden alcanzar facturaciones muy elevadas. En los últimos tres años, desde AdsFactory.net hemos ayudado a cientos de expertos a facturar más de 10 millones de euros a través de sus cursos.
Este dato, que no es más que una pequeña muestra del éxito de estas formaciones, reafirma la idea de que, lejos de ser una moda pasajera, los infoproductos han venido para quedarse. Entre otras cosas porque dan respuesta a las necesidades actuales de ambas partes.
Por un lado, ayudan a las personas a aprender de un modo flexible, adaptado a los nuevos tiempos y, por otro, permiten escalar y crear negocios rentables optimizando los recursos y aprovechando al máximo todo el potencial de Internet. De manera que, al final, todos salen ganando.
Elaborado por Joel López, experto en lanzamiento de infoproductos y CEO de AdsFactory.net