La inversión en innovación y desarrollo (I+D) española aumenta en los presupuestos de manera sostenida durante los últimos años. El ministerio de Ciencia e Innovación ha anunciado la mayor cifra de la historia para el 2021. No obstante, la situación es más crítica de lo que parece. España va por detrás incluso de algunos de los países con menor esfuerzo inversor histórico en I+D europeos como Grecia, Polonia y Portugal.
Concretamente, a pesar de ser la quinta economía europea, España se sitúa en la posición 18 de los 28 estados miembros de la UE en el 2019 en inversión en I+D respecto al PIB. Es así como este país ha ido descendiendo en la clasificación hasta quedar a la cola del bloque mediterráneo. Se encuentra a distancia de Rumanía, última de toda la Unión, pero superada por Grecia y Polonia. Por su parte, Eslovenia, Estonia, Grecia, Hungría, Polonia, Portugal y la República Checa, con menor renta por habitante que España, realizan un mayor esfuerzo inversor en este ámbito.
Cada vez es mayor la distancia con las principales economías del Viejo Continente, que ven un gasto-inversión en su I+D superior al 2%, incluso el 3%. Países como Alemania o Francia lo cumplen, sin embargo, el máximo histórico español está en el 1,25% del PIB según el INE. Estuvo en el 1,35% en el 2008. Esperaba llegar al 2% este año y al 2,12% en el 2007 según se señala en la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación, pero no ha ocurrido.
Por Comunidades
Si a nivel general las cosas no van como debería, por regiones tampoco deja mucho que desear. Ninguna de ellas alcanza el esperado 2%, si bien el País Vasco se queda muy cerca, en el 1,97%. Madrid destina el 1,71%; Navarra, el 1,67%; Cataluña, el 1,52%. Concretamente, aquellos territorios más apegados a los servicios, la construcción y el turismo de masas son los más rezagados en I+D.
Por su parte, el sector privado ha alcanzado su nivel máximo histórico de inversión en I+D, 8.783 millones de euros, en el 2019, lo que representa un incremento del 8,5% respecto a su máximo nivel, registrado en el 2008. En el sector público todavía no se han recuperado los niveles de inversión en I+D previos a la crisis, invirtiendo 265 millones de euros menos que en su máximo del 2010, lo que representa un 3,8% menos.
Los fondos europeos para la recuperación económica tras la crisis representan una oportunidad nueva para poder darle importancia a esta área.