
La nueva normalidad educativa ya ha llegado a algunas comunidades autónomas, en las que poco a poco se están incorporando los estudiantes cumpliendo de forma estricta todas las normas sanitarias impuestas. Los alumnos de 2º de Bachillerato o de 4º de la ESO son algunos de estos alumnos que desde hace unos días han podido retomar la rutina en los centros escolares. El miedo al contagio del virus ha hecho que algunos colegios impongan tasas de cara al próximo curso relacionadas con la pandemia.
Es el caso del colegio Estudiantes del barrio madrileño de Las Tablas. La dirección del centro ha comunicado a los padres que a partir de septiembre podrán pagar, de forma voluntaria, una "tarifa sanitaria" de 159 euros que se destinará a la compra de material sanitario, entre el que destacan los geles desinfectantes, termómetros, alfombrillas para desinfectar zonas comunes y suelas de los zapatos, incluyendo los honorarios del personal de limpieza del centro.
Las críticas de los padres ya han empezado a surgir y es que de esa cantidad también se destinará una parte a la compra de mascarillas para los docentes, pero no para los propios alumnos, que deberán traerlas de sus domicilios.
La ley indica que este tipo de cuotas deben ser siempre voluntarias y que, a la hora de imponerse, la empresa debe avisar a los clientes con anterioridad. Desde el centro explican que en ningún caso se trata de hacer negocio y que este dote solo se utilizará para cubrir costes, con el único objetivo de que todos los estudiantes estén en un entorno seguro.
Las Asociaciones no tienen constancia
La Asociación de Colegios Privados Independientes (CICAE) ha manifestado que, por el momento, no tienen constancia de que en los colegios que representan se vaya a cobrar una cuota.
Por su parte, la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos (CONCAPA) se mantiene en la misma línea y también niega que esta medida se vaya a tomar en otros centros.
Las cuotas de los colegios concertados en pandemia
Es uno de los principales problemas con los que se han encontrado miles de familias con el inicio del estado de alarma. Sin comedor, sin actividades y sin asistir al centro educativo, muchos padres esperaban que los colegios concertados no continuaran cobrando la cuota mensual, pero en muchos casos no ha sido así. En algunos colegios, las rebajas del cobro se harán en función de la edad de los alumnos o según las circunstancias de las familias.
Con esta situación, muchas de las familias se han visto obligadas a devolver el recibo del colegio. Por ley, los centros concertados no deberían cobrar a las familias ya que reciben una subvención de la Administración, pero si lo hacen es porque aseguran que con el dinero que reciben del Estado no pueden llegar a fin de mes.